La cuba de Elliott Erwitt: Dos momentos y un mundo por descubrir

24 jun 2017 / 12:33 h - Actualizado: 22 jun 2017 / 22:08 h.
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  • La cuba de Elliott Erwitt: Dos momentos y un mundo por descubrir
  • Elliott Erwitt. CUBA. Havana. 1964. / © Elliott Erwitt. MAGNUM PHOTOS
    Elliott Erwitt. CUBA. Havana. 1964. / © Elliott Erwitt. MAGNUM PHOTOS
  • Elliott Erwitt Havana Club 7 Fellowship - Cuba 2015
    Elliott Erwitt Havana Club 7 Fellowship - Cuba 2015

Esta exposición enmarcada dentro del calendario de Photoespaña 2017, no sólo muestra lo más variopinto de las dos visitas que Elliott Erwitt realizó a Cuba, sino que es resultado de la obtención de la beca Havana Club 7, una especie de concurso patrocinado por dicha marca de ron. Un viaje a Madrid para los aficionados a la fotografía es casi imprescindible

Nos ocurre con más de un creador visual; alguno ya desaparecido como el realizador de cine portugués Manoel de Oliveira o con el mismísimo David Lynch; que siendo ya octogenarios, viven o han vivido el final de sus carreras como una etapa más que dulce, en algunos casos fundamental para entenderlos como artistas en toda su dimensión.

Elliott Erwitt viajó por primera vez a Cuba en 1964 por encargo de la revista Newsweek para retratar en su hábitat natural tanto al Che Guevara como a Fidel Castro. De esta forma realizó numerosos primeros planos de ambos personajes históricos en forma de mágicas y cotizadas fotografías que se convirtieron en icónicas y referenciales del régimen comunista. En 2015 regresa al mismo lugar con 87 años y un bagaje como reportero y fotógrafo de la MAGNUM más que notable.

Por otro lado, y a pesar de su nacionalidad estadounidense, Erwitt nació en París en 1928, siendo sus padres rusos. El que será su oficio lo adquiere cuando se traslada a Estados Unidos, donde conocerá a Edward Steichen y Roy Stryker. En 1953, Robert Capa le pide unirse como fotoperiodista a la mentada agencia, llegando a ser su director en varias ocasiones. Entre los principales lugares donde ha expuesto su obra destacan el International Center of Photography, el MOMA, el Art Institute de Chicago, el Barbican de Londres o el madrileño Museo Reina Sofía.

Dentro de las fotografías disparadas en 1964, la primera en sorprendernos es la de un viejo con un puro gastado en la boca junto a un joven en primer término que viste una gorra rota por la parte de la visera, le sigue la del comandante Fidel retratado junto a un conjunto de soldados a los que da órdenes. El grupo de siete estudiantes femeninas en lo que suponemos el recreo de un colegio de pago, con sus uniformes tal vez podrían ser parte de ese antes de la Revolución. A Erwitt le gustaba sorprender a personajes anónimos caminando y así lo hace en un semiescorzo con el que pasa delante de unos grandes almacenes donde se anuncia «La China de hoy». El primerísimo plano de Fidel con una cazadora forrada por dentro de plumas blancas nos hace ver la fortaleza ante las altas temperaturas. En otra que bien podría llamarse o relacionarse con los oficios consigue en un retrato a tres, que la cara central del médico aparezca totalmente oscurecida, su jefe con un puro y gafas de montura gruesa parece estar dándole órdenes, el otro personaje sujeta una cámara fotográfica y va muy repeinado. En la más antigua de béisbol vemos la grada hasta la colcha y un banquillo de descanso desde donde el cátcher parece estar esperando movimiento; esta foto podría ser la primera parte con respecto a la disparada en 2015, como veremos. Desde la zona monumental de la Revolución, un hombre alto y desgarbado camina de perfil. También nos muestra una vista panorámica de una poblada ciudad que no sabemos si es Santiago o La Habana. La ingenuidad en Ernesto Che Guevara se deja ver no tanto por su falta de eficaz rebeldía, sino por su juventud. Otro plano de conjunto de Fidel esta vez rodeado de paisanos, donde estos parecen más convencidos de su mensaje que él mismo, que se mesa escéptico el bigote y parte de la barba. Es destacable como también era la imagen del joven y el viejo, la imagen de Fidel retratado desde el interior de su coche como si fuese una estrella del rock, con un montón de fans jóvenes femeninas dispuestas a darlo todo y es que en ambas juega de manera especial con la profundidad de campo, siendo la parte más lejana más luminosa que la cercana, logrando desenfoque en primer término. Destaca igualmente la de la grada de un espectáculo cualquiera, llamando la atención el rostro de dos sonrientes mujeres con gafas de sol, una de las cuales se entretiene haciendo punto de cruz. Por último, el retrato del Che en claroscuro no sólo endurece sus facciones, sino que lo hace más duro y capaz de todo quizás por ello, utilizando además un escenario sobrio que también ayuda a definir su personalidad.

De su viaje realizado en 2015 destacan entre otras la del vendedor callejero de fruta cuya mirada parece ir hacia ninguna parte, la de una discoteca o after hours abierta a primera hora de la mañana, la de la preparación de la boda de una hija mayor, donde se nos va la vista a los tres hermanos pequeños entre apáticos y tristes mientras imaginamos la alegría de la madre obesa contenta porque pueda lucir las mejores galas. También es reseñable la de los seis chicos jóvenes de la calle entrenando sin guantes al boxeo en lo que parece un barracón, imagen esta alejada de los escenarios de gimnasia a los que estamos acostumbrados, la del mundo del circo desde la elegante vestimenta de dos de sus payasos, los pescadores sombreados en el malecón, uno de los cuales tira la caña en dirección al suelo en vez de al mar. De esta etapa destacan igualmente la de la bailarina junto a su profesora o madrina, una mítica mujer cubana, la del hockey sobre hielo, la segunda parte de los chicos jugando al béisbol, esperando todos, esta vez sí, para salir a correr hacia la siguiente base. Por último, cabe destacar la imagen de chicos ya mayores jugando al fútbol en una zona medio asfaltada, ingeniándoselas con objetos inservibles y una red para construirse sus propias y peculiares porterías.

Photoespaña 2017 incluye en sus muestras la de Elliott Erwitt, trabajos realizados en Cuba en momentos muy dieferentes de su vida

Photoespaña 2017, acerca la obra de Elliott Erwitt que realizó a Cuba. / © Elliott Erwitt. MAGNUM PHOTOS