La puerta en el muro

19 oct 2015 / 20:18 h - Actualizado: 19 oct 2015 / 20:19 h.
"Libros - Aladar"
  • La puerta en el muro

En 1911 se publicaba The Door in the Wall and Other Stories, un libro de relatos de Herbert George Wells. Y allí estaba La puerta en el muro. Uno de los primeros relatos de ciencia ficción de la historia.

La edición de Acantilado (2003) llega a las 54 páginas, lo que indica que el texto es breve.

Es difícil explicar lo que representa la lectura de un texto como este.

Como es habitual en la obra de todos los autores, encontramos asuntos recurrentes a los que ellos van y vienen sin cesar. En el caso de H. G. Wells, la dicotomía entre la estética y la ciencia, entre la intuición o las creencias y la razón, están presentes desde el comienzo del relato. El protagonista es capaz de imaginar o de vivir situaciones que saltan la frontera de lo racional, pero, al mismo tiempo, dedica su vida a la política en la que todo ha de estar alejado de fantasías. Pero La puerta en el muro es algo más que todo esto.

El lector sabe que ese muro y esa puerta dividen un mundo de otro, es decir, nuestra realidad cotidiana (esa que podemos tocar) de la que forma parte de nuestra espiritualidad, de nuestro pensamiento, de la inteligencia, de lo bello como forma de entendimiento. Y el lector sabe que la última vez que el protagonista cruza el umbral de esa puerta ha elegido. Somos, tal y como es la realidad, duales. Somos esto y aquello, buenos y malos, bellos y horribles, bondad y maldad. No podemos vivir en las fronteras porque nuestro ser es ambas cosas de lo que elijamos. Somos todo y no somos nada y el tránsito de una parte a la otra no existe porque transitamos las dos constantemente.

El relato de H. G. Wells es, sobre todo, emocionante e inquietante. El autor juega con la sugerencia y nunca con lo explícito. Cualquier explicación sería matar el texto y Wells lo sabe. Deja que sea el lector el que se coloque en un lugar determinado.

Es una auténtica maravilla que nadie debería perderse aunque, es posible, que una primera lectura no sea suficiente. Los matices que van apareciendo con el tiempo y con las lecturas sucesivas son lo que hacen de este relato una obra maestra.

Calificación: extraordinario.

Tipo de lectura: pausada.

Tipo de lector: desde los 14 años en adelante.

Personajes: el universo.

¿Dónde puede leerse?: muy pegados a cualquier muro que podamos imaginar.