Constructores denuncian que la Junta renuncia al 80% de la obra civil comprometida

El sector califica de «tomadura de pelo» y «venta de humo» el nuevo Plan de Infraestructuras 2014-2020

06 sep 2016 / 12:13 h - Actualizado: 06 sep 2016 / 12:20 h.
"Construcción","Junta de Andalucía"
  • Un trabajador en una obra en Sevilla. / Pepo Herrera
    Un trabajador en una obra en Sevilla. / Pepo Herrera

Las asociaciones de constructores y promotores Fadeco, Ceacop y Asica y el Colegio de Ingenieros Caminos, Canales y Puertos de Andalucía denunciaron este martes que el nuevo Plan de Infraestructuras y Transportes de Andalucía 2014-2020 (PISTA) supone una «tomadura de pelo» y una «venta de humo» ya que la Junta renuncia en él al «80 por ciento de sus compromisos anteriores» en obra civil. El sector, que ha presentado alegaciones a la totalidad del plan, exigió su «retirada inmediata y la reposición del Plan 2007-2013». El decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, José Abrahan Carrascosa, fue gráfico. «El sector está muerto. Si nos van a dar la puntilla que sean claros y nos la den ya y las empresas cerrarán ordenadamente o se irá fuera, pero se está jugando con el pan de miles de familias», reclamó.

Los presidentes de Fadeco y Ceacop, Fancisco Carmona y Felipe Fernández respectivamente, pusieron cifras a a situación el sector. Desde el inicio de la crisis ha pasado de 400.000 a 145.000 trabajadores en Andalucía y se ha reducido el número de empresas en un 35 por ciento. Su homólogo de Asica, Ignacio Sánchez, destacó que de un documento de 300 páginas, el único anexo económica es una «tabla de ocho filas» donde aparece una inversión total de 1.300 millones de euros para cuatro años sin especificar «cuánto sale de la Junta de Andalucía, cuánto del Estado y cuánto de la Unión Europea».

El documento refleja que 337 obras viarias previstas no se ejecutarán al menos hasta 2020 o que el plan de la bicicleta contará estos cuatro años con una inversión de 33 millones «cuando hace dos años se anunciaron a bombo y platillo 380 millones», insistió Sánchez para subrayar la falta de seriedad de un documento que «no es un plan».

Los responsables de promotores y constructores lamentaron que ante sus quejas siempre reciben como respuesta de la Junta la prioridad de las políticas sociales y que «mientras no tenga dinero no voy a hacer nada», si bien defendieron que «la principal política social es el empleo» y que «la construcción es una gran industria» que el Gobierno andaluz ha decidido dejar de lado. Con todo, denunciaron que en el plan no aparecen tampoco infraestructuras sanitarias o educativas y que pese a que la Junta habla de «colaboración público-privada», no se ha sentado a hablar con el sector para explorar esta vía como salida transitoria hasta que se recupere la inversión pública. También minimizaron el impacto de la apuesta por la rehabilitación de vivienda que defiende la Junta.

Ante la actual parálisis política, el sector augura que 2016 acabe con un descenso en la inversión en obra pública del 40 por ciento respecto al año pasado, ya que cifraron la bajada en el primer semestre en un 28 por ciento sobre el mismo periodo de 2015 en el que ya a su vez hubo un descenso similar respecto a 2014. Los responsables del sector recordaron que el Gobierno central ya cerró los presupuestos en junio, por lo que no se licita obra pública desde ese momento y prevén que la Junta los cierre e octubre o noviembre, al tiempo que temen que la falta de Gobierno central obligue a la comunidades a prorrogar también sus presupuestos. En este sentido, lamentaron no tener noticias de Ciudadanos, potencial socio del Gobierno socialista de Susana Díaz para aprobar los presupuestos de 2017. «No ha dicho esta boca es mía» respecto al Pista, dijo el decano de los Ingenieros de Caminos, que lamentó que «aquí no lo esperamos, debe estar en otros menesteres».

El presidente de Ceacop sí reconoció que el nuevo consejero de Fomento, Felipe López, al llegar se encontró con la obra pública paralizada y que sí se comprometió y lo ha cumplido a pagar la alta deuda que la Junta mantenía con las empresas del sector y dejarla a cero. «Parece que sí está al día y como no hay inversión no se genera nueva deuda», subrayó.