Diez personas han tenido que ser desalojadas tras un incendio en una zona de infraviviendas sofocado la pasada madrugada en el asentamiento Los Naranjos de Lepe, Huelva, sin que nadie haya resultado herido.
El fuego se ha iniciado por la explosión de una bombona, y se ha extendido al resto de las chabolas, arrasando una zona de unas dos hectáreas de terreno.
A la una de la madrugada, el Teléfono 112 recibió la llamada de un particular que alertaba de un incendio en una zona de chabolas próxima a la avenida de Andalucía, cerca del cementerio.
En ese mismo momento, el Centro Coordinador activó a la Policía Local, a los Bomberos de la Diputación, a la Guardia Civil y a la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) en caso de que fuera necesaria algún tipo de intervención.
Fuentes policiales han confirmado que el fuego quedó extinguido casi a las cinco de la madrugada y que, como consecuencia del suceso, diez personas tuvieron que ser trasladadas a un campo de fútbol de la localidad, a la espera de un posterior realojo.
Una vecina de la urbanización La Gaga grabó desde su balcón el siniestro, lo que da una idea de la dimensión del suceso, que no llegó a afectar a las tiendas de un centro comercial cercano, aunque sí hubo que desalojar los comercios que a esa hora aún estaban abiertos.
«Parecía un infierno»
La delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Lepe, Mariana Otero, ha calificado de “infierno” la situación vivida esta madrugada en el asentamiento de inmigrantes, y ha dicho que ha sido clave que la campaña de la fresa no se haya iniciado para que no haya habido víctimas.
En declaraciones a los periodistas en el lugar de los hechos, Otero ha explicado que se ha activado “el dispositivo que tenemos en caso de emergencias como este de forma inmediata”, indicando que, tras producirse el fuego, “en cuestión de treinta minutos esto era el infierno, era muy alarmante, sobre todo porque era de noche”.
Ha indicado que en las dos hectáreas de terreno afectadas han ardido unas 120 chabolas, explicando que no se han producido víctimas de forma milagrosa, sobre todo “porque al ser temporada baja -de la campaña fresera- hay muchas chabolas vacías”.
Ha concretado que ha sido un incendio “fortuito”, ya que “por las temperaturas tan bajas seguramente alguien encendió una hoguera, y al ser de madrugada sólo les ha dado tiempo a salir corriendo y han perdido todas sus pertenencias”.
«Trabajamos para erradicar el chabolismo»
Mariana Otero ha añadido que en la localidad se trabaja en lo que conoce como ‘Agenda 2020’, el plazo máximo marcado para erradicar el chabolismo, ya que en el municipio onubense hay, en temporada alta de la fresa, entre febrero y mayo, más de 1.500 personas viviendo en estas condiciones.
“Tenemos, entre otras cosas, un registro de viviendas con ayudas para propietarios que las quieran poner a disposición de los inmigrantes, pero las herramientas que tenemos en las manos son las que tenemos”, ha lamentado.
Tras comentar que los inmigrantes desalojados seguirán en las instalaciones del estadio ‘Ciudad de Lepe’ por tiempo indefinido, ha señalado que el Ayuntamiento no tiene competencias para desalojar el terreno de las chabolas, “porque es un terreno privado, no municipal, lo ha comprado una promotora al banco e imaginamos que, posiblemente, ejercerá su derecho en algún momento”.
La delegada de Servicios Sociales ha señalado que a las personas desalojados se les ha dotado de colchones, mantas y algo de ropa, y han podido usar las duchas del estadio para asearse, mientras se trabaja en su realojo.