-
Una de las últimas convocatorias de oposiciones para maestros en Andalucía. / Manuel Gómez
La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía activará la próxima semana la bolsa de trabajo del cuerpo de maestros para el nombramiento de más de 600 funcionarios interinos. En un comunicado, la Consejería indicó que estos funcionarios interinos se sumarán a los 10.416 que ya tienen asignados destinos para el próximo curso 2016-2017.
De este modo, la Junta ha nombrado hasta ayer un total de 10.416 interinos para la cobertura de puestos vacantes de la plantilla de funcionamiento para el nuevo curso. Este dato, según destacó, significa un incremento de 91 funcionarios interinos respecto al curso anterior, tomando como referencia las fechas de finales de agosto. Además, la Consejería aseguró que mantendrá la misma plantilla docente que el curso pasado, compuesta por 95.415 profesionales, con lo que se garantiza plenamente la prestación del servicio educativo en toda la comunidad autónoma.
La iniciativa de Educación llega después de un verano en el que los interinos andaluces se han rebelado ante lo que, desde su punto de vista, supone una «incorrecta aplicación» de la implantación de la segunda lengua obligatoria. Durante las últimas semanas han organizado algunas concentraciones en distintas ciudades para denunciar su situación. A partir de septiembre, será obligatoria en 3º y 5º de Primaria. Los interinos consideran que la incorporación de los maestros de francés en los centros educativos conllevará la no contratación de un millar de ellos que no dominan esta lengua. La situación se agrava, denuncian, porque muchos de ellos no tendrán prestación por desempleo al no haber cumplido el tiempo suficiente de servicio. El colectivo de interinos ha insistido en que no está en contra de la aplicación de una segunda lengua extranjera.
Por su parte, desde la Consejería de Educación se insiste en que la incorporación de docentes «no implica reducción alguna de maestros». Argumenta que la implantación del segundo idioma supone un incremento de maestros de Primaria especialistas, que sustituyen a profesores generalistas no habilitados, por lo que «no hay recortes en la plantilla» a pesar de la disminución de 13.000 escolares matriculados en Infantil y Primaria por causas demográficas.
Este asunto de los interinos provocó la solicitud por parte del grupo parlamentario del PP de un pleno extraordinario en la Cámara, antes del inicio del periodo de sesiones, para abordar este asunto. La Diputación Permanente del Parlamento rechazó la propuesta de los populares.