El Coliseo de los ‘Gaditanorum’

El Teatro Romano de Cádiz recibe más de 13.600 visitas en el primer mes de la apertura del centro de interpretación que permite recorrer las gradas y galerías

h - Actualizado: 22 ago 2016 / 09:53 h.
  • El teatro fue descubierto en 1980 pero se acaba de abrir el centro de interpretación con acceso a las gradas y galería abovedada. / El Correo
    El teatro fue descubierto en 1980 pero se acaba de abrir el centro de interpretación con acceso a las gradas y galería abovedada. / El Correo
  • El centro de interpretación muestra imágenes del bloque del Coliseo. / El Correo
    El centro de interpretación muestra imágenes del bloque del Coliseo. / El Correo

Con el levante dificultando a los veraneantes las ansiadas jornadas de playa en las arenas de la capital gaditana, las visitas culturales al patrimonio que ofrece la ciudad más antigua de Occidente suponen una alternativa para disfrutar de las vacaciones en la tacita de plata. Este año, la reciente apertura al público del teatro romano de los Cornelios Balbos, ha ampliado esa oferta que incluye el yacimiento fenicio de Gades que desde hace años puede visitarse bajo el teatro de títeres de la Tía Norica con restos del trazado y casas de las ciudades fenicias sobre los que posteriormente se ubicó una factoría de salazón romana.

El pasado julio se abrió el nuevo centro de interpretación con acceso directo a las gradas de un teatro que en su día llegó a tener capacidad para 10.000 espectadores, siendo el segundo mayor de la provincia Baetica tras el de Córdoba, capital de la misma. Desde entonces, más de 13.600 personas han visitado un recinto que fue mandado construir en el último cuarto del siglo I a.C. por la familia gaditana de los Cornelios Balbos, que llegaron a tener tanto prestigio en la Roma imperial que en el Coliseo se han descubierto bloques de gradas con la inscripción Gaditanorum reservadas a ilustres gaditanos residentes en la urbe (médicos y senadores, entre otros). Según los estudios realizados por arqueólogos de la Universidad de Cádiz, las inscripciones datan de los siglos II y III d.C, y supone un ejemplo nada habitual de la reserva de asientos en el Coliseo a espectadores nobles extranjeros.

El Teatro Romano de Cádiz fue mandado construir por Lucio Cornelio Balbo el Menor aprovechando, como era habitual, la pendiente del terreno para el graderío. Sus principales peculiaridades son sus grandes dimensiones (118 metros de diámetro) y el buen estado de conservación de una galería anular abovedada que discurre por debajo de las gradas y era usada como acceso privilegiado de los espectadores ilustres.

El teatro fue descubierto en unas excavaciones en 1980 pero es ahora cuando se ha abierto al público la posibilidad de recorrer hasta 75 metros de la galería abovedada y parte del gradería, con acceso directo desde el centro de interpretación, ubicado en la calle Mesón (la del famoso Pay Pay). La proximidad de casas y edificios pegados al teatro hace prácticamente imposible que algún día se pueda desvelar en todo su esplendor. Los investigadores se centran ahora en tratar de desentrañar cómo sería la escena que en otros teatros de similares dimensiones se caracteriza por tres puertas divididas por filas de columnas con profusa decoración en la central.

En el centro de interpretación pueden verse maquetas interpretativas, restos de capiteles y columnas y una curiosa inscripción que no deja en muy buen lugar a Lucio Balbo y que muestra que lo de la corrupción de los poderosos viene de largo