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ANDALUCÍA .SV26. SEVILLA 28/05/2014 - El defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, durante su intervención en el pleno del Parlamento de Andalucía donde presento su informe de 2013. / Julio Muñoz (EFE)
El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, confió en que en el futuro Parlamento que surja tras las elecciones del 22M, con la presencia de cinco fuerzas políticas, “aumente la cultura del pacto, de la negociación” que reconoció “no la veo muy desarrollada”. Maeztu, que presentó hoy en la Cámara andaluz el informe anual de la institución, el primero realizado bajo su mandato (ya presentó el de 2013 pero con datos correspondientes en su mayoría a la etapa de José Chamizo), valoró que en los comicios de hace una semana hubiera mayor participación y despertarán el intererés, sobre todo de los votantes más jóvenes, y señaló que ahora las fuerzas que han obtenido representación “toca hacer gestión y la administración de ese voto”.
Reconoció que la presencia de más grupos implica que será un Parlamento “más complejo de administrarlo” pero defendió que ha habido más opciones para la ciudadanía y se ha configurado un espectro político “más matizado”. En este sentido, pidió “responsabilidad” a los grupos políticos para no retrasar la investidura del presidente andaluz ya que “tirarse ahora mucho tiempo o el hipotético caso de una repetición [de elecciones] se volvería a perder mucho tiempo”. “Que se pongan cuanto antes mejor”, instó, y ante todo confió en que en esta nueva etapa “aumente la cultura del pacto, de la negocación, que las ideas buenas vayan adelante y no unos contra otros. Y esa cultura no la veo yo muy desarrollada. Que prioricen los intereses de los ciudadanos”, reclamó.
En cuanto al informe anual presentado hoy, el mismo recoge que en 2014 la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz recibió 6.123 quejas (un 0,6 por ciento menos que el año anterior) y 9.185 consultas, si bien en total se realizaron 15.308 actuaciones y fueron atendidas 165.817 personas. un 300 por ciento más que en 2013 aunque ello se debe sobre todo a la denuncia masiva sobre la Mezquita de Córdoba y su inmatriculación por la iglesia que aglutinó a 1250.000 personas.
La vivienda copó el mayor volumen de quejas y consultas, 450, de las que 360 se debían a problemas con las ayudas para ésta y 52 por desahucios, lo que llevó a Maeztu a reclamar un “gran pacto por la Vivienda en Andalucía” entre ayuntamientos, Junta, constructores, promotores y entidades financieras para dar soluciones porque “esto se está disparando, cada vez hay más corralas”. El Defensor, que ha remitido un cuestionario a todos los municipios andaluces para tratar de elaborar un Mapa andaluz de la vivienda y conocer las VPO vacías, las existentes para compraventa o alquiler, los demandantes registrados y los tiempos y procesos de adjudicación, señaló cómo principales problemas los desajustes en los regímenes (con más vivienda para venta que para alguiler), la tardanza en los procedimientos que hacen que la gente vea las viviendas vacías y las ocupe irregularmente y el hecho de que los bancos no pongan su stock de viviendas a disposición, además de reclamar que se ajusten caso a caso los precios de los alquileres sociales porque “hay familias que no pueden pagar ni 170 euros”.
Los problemas de vivienda han centrado también las mediaciones del Defensor en el último año, sobre todo para la negociación de daciones en pago, supresión de cláusulas suelo y evitar cortes de luz y agua, un problema también frecuente para el que abogó por promover el fraccionamiento de este tipo de deudas.
Para Maeztu, la leve recuperación económica de 2014 no ha llegado aún a la ciudadanía, por lo que más de la mitad de las quejas recibidas se refieren a derechos sociales. Junta a la vivienda, los retrasos en las valoraciones y prestaciones de la Dependencia y en el Salario Social centraron las reclamaciones, además de surgir como temas hemergentes las peticiones de mayor transparencia en la información de las administraciones al servicio del ciudadano.
Por provincias, Maeztu destacó que en el casco histórico de Cádiz hay un grave problema de infravivienda, en Granada un exceso de sanciones de tráfico inapelables -muchas de ellas a turistas- y en Málaga y Sevilla, el “colapso” de los juzgados de lo Mercantil y Social, por lo que ya se ha dirigido al Ministerio de Justicia para reclamar más órganos, ya que se fijan juicios por concursos de acreedores o pensiones para 2018. La contaminación acústica es también un problema generalizado aunque “Sevilla se lleva la palma”.