El déficit andaluz supera la previsión de la Junta y amenaza con recortes

Hacienda corrige al alza el agujero en las cuentas hasta el 1,13 por ciento del PIB. La brecha entre ingresos y gastos asciende a 1.444 millones de euros

31 mar 2016 / 19:00 h - Actualizado: 31 mar 2016 / 20:49 h.
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  • La consejera de Hacienda, María Jesús Montero, ayer en el Parlamento andaluz. / Europa Press
    La consejera de Hacienda, María Jesús Montero, ayer en el Parlamento andaluz. / Europa Press

Andalucía está entre las comunidades que ha incumplido el objetivo de déficit de 2015, pero por unas décimas. El límite impuesto a la brecha entre ingresos y gastos se fijó en el 0,7 por ciento del PIB para las autonomías, y la Junta anunció en febrero que cerró el ejercicio en el 0,81. Ese es el dato que dio la presidenta Susana Díaz en el Parlamento para anunciar que Andalucía había cumplido el déficit, un año más, sin privatizar servicios ni acometer despidos en la administración, como otras regiones. Pero los técnicos del Ministerio de Hacienda han corregido esa cifra al alza.

El departamento de Cristóbal Montoro anunció ayer que, al cierre definitivo del ejercicio 2015, el déficit andaluz es del 1,13 por ciento, algo menos de medio punto (0,43) por encima del objetivo marcado para las comunidades, pero medio punto (0,53) por debajo de la media de las regiones (1,66). Andalucía ha recortado progresivamente su déficit en los últimos cuatro años, cumplió con el tope de Bruselas en 2012 y rozó ese objetivo en 2014 y 2015. Es la cuarta comunidad con menor déficit, pese a lo cual acaba de afrontar un agujero inesperado en sus cuentas de 292,3 millones que obligarán a la Junta a reactivar medidas de ahorro y devuelven la amenaza de nuevos recortes. La consejera de Hacienda, María Jesús Montero, se apresuró ayer a rechazar esta posibilidad.

El déficit público español se ha disparado hasta el 5,16 por ciento del PIB (el objetivo era el 4,2), un desvío de 10.000 millones que expone a España a una sanción europea de 2.000 millones y empuja al futuro Gobierno a afrontar ajustes por 25.000 millones. Montoro achaca el desvío a las comunidades y corrige sus cifras imputándoles ajustes con los que no contaban, como el tratamiento de enfermos de Hepatitis C, un gasto sobrevenido por la crisis sanitaria del año pasado. El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, dijo hace un mes que el Estado asumiría íntegramente ese gasto –mil millones–.

La consejera andaluza de Hacienda mostró su indignación por el cambio y acusó al Gobierno de «maquillar» el recuento del déficit para que «una vez más la Administración central parezca más cumplidora, mientras las comunidades parecemos grandes derrochadoras». Al computar el gasto del tratamiento de la Hepatitis C, el déficit andaluz previsto aumenta en 13 décimas, unos 200 millones más, pasando del 0,81 al 0,94 por ciento del PIB. Pero el cómputo final ofrece una cifra aún mayor. Sin embargo, el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, pidió a la Junta que «no mienta» y «deje de intentar confundir con las reglas acordadas», ya que los gastos del tratamiento de la Hepatitis C «no penalizan ni obligan a esfuerzos adicionales ni medidas especiales» para el cumplimiento del déficit. La Junta «sabía que se había acordado así», replicó.

Es el segundo año seguido que Andalucía roza el objetivo de déficit, quedándose mucho más cerca que Cataluña o Valencia, que triplican el desvío de sus cuentas. Para Montero, Andalucía ha cumplido «de manera razonable» con la consolidación fiscal a la par que mantiene un alto grado de ejecución presupuestaria (98,7 por ciento). Rechaza que en el desvío hayan tenido algo que ver las medidas que la Junta aplicó ante la proximidad de las elecciones, y que incidieron en un mayor gasto y menos ingresos (reducciones tributarias). El déficit andaluz en 2015 se debe en parte a dos factores: el aumento de la recaudación vía impuestos en un 4,2 por ciento y el crecimiento de la economía en un 2,2. El déficit del 0,81 por ciento calculado por la Junta suponía reducir la necesidad de financiación en 679 millones respecto a 2014.