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Los burritos encontrados. / El Correo
Rocío y Bhelma, dos de los tres burritos que fueron robados la madrugada del pasado domingo del lugar donde viven, El Burrito Feliz, la sede del colectivo que los cuida con fines naturales, han sido encontrados por la Guardia Civil esta pasada noche en una carretera de la localidad onubense de Paterna, cerca de la sede de la asociación en Hinojos.
Las dos hembras, de una semana y tres meses, se encontraban abandonadas en una carretera cuando han sido encontradas por agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona). Las personas que los sustrajeron, aparentemente, los abandonaron a su suerte.
Ahora, la urgencia es encontrar a Paladín, que tiene sólo dos semanas de vida, y no puede alimentarse sin ayuda de su madre, lo que aun genera mas ansiedad en los miembros de la Asociación en relación con este robo.
Estos burritos forman parte de la cantera de los burros bombero de Doñana. Su trabajo hace que los bosques del Parque Nacional sufran menos en verano, ya que la se dedican a realizar cortafuegos en zonas sensibles de difícil acceso para evitar incendios forestales en el Parque Nacional, que comprende las provincias de Sevilla, Cádiz y Huelva.
Trabajo imprescindible
Los asnos comen el pasto seco de forma sistemática y concienzuda permitiendo en algunas zonas que este desaparezca en casi su totalidad.
La plantilla de "burritos bomberos" está compuesta por animales que trabajan a diario durante aproximadamente siete horas en zonas sensibles de sufrir un incendio por acción del pasto seco, donde la belleza natural del entorno en pleno bosque favorece la afluencia de amigos de los animales y la naturaleza.
El Burrito Feliz decidió hace años convertir la provincia onubense en su centro neurálgico a nivel internacional y cuenta con miles de visitas en su página web, la mayoría del extranjero.