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María Jesús Montero, consejera de Hacienda de la Junta, atiende a la prensa. / Julia Moreno
La Junta de Andalucía no ve avance alguno en la posición del Gobierno para liderar la reforma del modelo de financiación autonómica. El Ejecutivo andaluz dibuja, en este sentido, al ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro tejiendo y destejiendo, como Penélope, para dar la impresión de que hace algo, aunque en realidad no ha dado una puntada más. Así lo apuntó ayer la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, que no considera ni noticiable ni significativo el documento remitido por el Gobierno a las comunidades autónomas.
El texto en cuestión, según aseguró ayer Montero, es un acta de las discusiones del Comité Técnico que analizó las propuestas del Grupo de Expertos organizado por el Consejo de Política Fiscal y Financiera. El documento sí pudiera ser relevante ya que plantearía algunas discrepancias con la propuesta andaluza aprobada en el Parlamento, «no hay ninguna toma de posición», explicó la consejera, al tiempo que recordó que el Comité de Expertos ya recogió en sus conclusiones posiciones distintas. La Junta, según la titular de Hacienda, espera que el Gobierno medie en el debate sobre esas distintas propuestas para luego presentar su modelo para la reforma de la financiación autonómica. La Junta espera alguna respuesta del Gobierno sobre su plan de incorporar 16.000 millones adicionales al sistema, o medir la población universitaria a efectos del cálculo de población ajustada.
Montoro insistió ayer en que sin el PSOE «no podrá hacerse» la renovación de la financiación autonómica y local y que su intención es convocar «pronto» el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL). En esas reuniones con el CPFF y la CNAL se abordarán las bases de los nuevos sistemas de financiación, que «vendrían luego» al Congreso, para buscar el consenso, especialmente con los socialistas, ya que sin ellos no se pueden renovar, «habida cuenta de la importancia que tienen en esta Cámara», además de gobernar en siete comunidades y en miles de ayuntamientos».
El ministro habló ayer de «pronto», pero no es algo que tranquilice a Montero que «no sabe en qué consiste el «en breve» de Montoro». El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se comprometió en la reunión que tuvo hace varias semanas con la presidenta Susana Díaz el Consejo de Política Fiscal. La sospecha de la Junta es que el Gobierno quiere dejar pasar 2018 sin reformar el modelo de financiación cumpliendo los objetivos que marca Bruselas a costa de comunidades autónomas y ayuntamientos, que sí han cumplido con los objetivos de déficit.
La demora en los movimientos del Ejecutivo central empieza a soliviantar a algunas autonomías. Varios barones socialistas han planteado la posibilidad de abordar reformas parciales del modelo mientras el nuevo sistema no ve la luz.
Entre las ideas que se han puesto sobre la mesa están la del reparto de la subida del IVA, del 18 al 21 por ciento, aplicada por el Gobierno en 2012. La recaudación del alza del tributo no llegó a la comunidades ya que se la quedó Hacienda. Extremadura, Aragón y Castilla-La Mancha también han planteado que las liquidaciones que les corresponden por IRPF, IVA, impuestos especiales o transferencias de fondos les lleguen con una mayor rapidez a sus arcas. Por último, la reestructuración de la deuda sería otra de las propuestas que habría llegado a Montoro.