Las nuevas tecnologías protegen a 2.320 víctimas de malos tratos y controla a 266 agresores

Un total de 14.046 mujeres andaluzas víctimas de violencia de género están actualmente dadas de alta en el sistema VioGen en el que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado hacen un seguimiento y evaluación de su nivel de riesgo para adoptar las medidas de protección más adecuadas. 31 de ellos presentan un nivel de riesgo alto y tres en concreto extremo, según los datos actualizados facilitados hoy por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que no obstante recordó que los datos cambian continuamente porque la evaluación del riesgo es periódica. Precisamente, el Gobierno acaba de poner en marcha un nuevo protocolo para evaluar ese riesgo, con 23 indicadores más que recogen datos como si la mujer tiene menores a su cargo o la actividad en internet y las redes sociales de agresor y víctima. Y es que las nuevas tecnologías se han convertido en un nuevo campo de acción de la violencia de género, si bien en sentido contrario también forman parte de los mecanismos de protección. De hecho, actualmente, 2.320 víctimas llevan consigo unos móviles con localizadores GPS en conexión directa con la Policía para poder alertar ante un ataque o ruptura de las medidas de protección por parte del agresor de la forma más rápida posible al tiempo que 266 agresores llevan, por orden judicial, un dispositivo electrónico que sigue sus pasos y envía una señal de alerta en caso de que vulnere las órdenes de alejamiento o prohibición de comunicación impuestas. En ambos casos, hay un aumento del uso de este tipo de dispositivos ya que a final de 215 había 2.283 mujeres con los móviles con GPS conectados con la Policía y 241 agresores con los brazaletes de seguimiento.

Sanz explicó que el nuevo protocolo de valoración del riesgo ya se aplica a todos los nuevos casos que entran en el sistema VioGen mientras que a los que ya se hace un seguimiento, se les incorporarán los nuevos indicadores en la evaluación que periódicamente se hace del riesgo de cada víctima. Además, ante el nuevo protocolo de autoprotección puesto en marcha recientemente por el Gobierno, señaló que desde la Delegación del Gobierno de Andalucía se va diseñar un plan de formación específica para los que agentes que luchan contra la violencia de género en el diseño de planes individuales de autoprotección para cada mujer basados en pautas y consejos de conducta a adoptar en su vida cotidiana así como en involucrar al entorno familiar y social y establecer con ellos señales y códigos que le permitan pedir ayuda en caso de emergencia. «Es un complemento, no pretende cargar la responsabilidad en las víctimas sino que incide en la importancia del entorno», subrayó Sanz, quien reconoció que aún hace falta «incidir muchísimo en concienciar a los entornos del papel que pueden tener» en la protección de las víctimas de violencia de género. El teléfono gratuito 016, que no deja rastro en la factura telefónica, permite denunciar cualquier caso de manera anónima.

Y es que apenas un uno por ciento de las denuncias presentadas (7.027 en el primer trimestre del año según los últimos datos publicados del Consejo General del Poder Judicial, un 3,3 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado) proceden de familiares, amigos o vecinos de la víctima. Sanz también hizo hincapié en la «preocupación» por la renuncia de un 10 por ciento de las denunciantes (724 en el primer trimestre del año), en la que influyen factores como el miedo o la dependencia emocional que conlleva el ciclo de la violencia. No obstante, el delegado del Gobierno insistió en la necesidad de denunciar para que se puedan poner en marcha los mecanismos de protección y en que «la retirada de la denuncia es un factor de riesgo para la víctima». En el primer trimestre del año, fueron adoptadas por los jueces 1.365 órdenes de protección de las 1.928 solicitadas. De las dos mujeres asesinadas en lo que va de año en Andalucía, en Lepe (Huelva) y en Sevilla, una había denunciado. Una tercera víctima de esta lacra es el hijo de una mujer agredida en Níjar (Almería), que continúa hospitalizada. En toda España, son ya 30 las víctimas mortales de la violencia de género en lo que va de año.