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El Defensor, Jesús Maeztu, reunido ayer con responsables de Cruz Roja, Accem, CEAE y Cepaim. / El Correo
Las ONG Cruz Roja, Accem, Cepaim y CEAR llevan años trabajando en la atención a la población inmigrante sea cual sea el motivo que les trae a España y Andalucía y no es la primera vez que se produce un flujo de refugiados huyendo de conflictos armados como el que actualmente tiene a Europa en jaque procedente de Siria. Los responsables de estas cuatro entidades recordaron ayer, tras reunirse con el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, que conflictos como el de Sudán provocaron un éxodo de 30.000 personas y antes del cierre de las fronteras de la UE, sólo en Andalucía han sido atendidos unos 8.000 sirios huidos de la guerra civil de su país y de la crueldad del autodenominado Estado Islámica. Por ello, tanto los presidentes regionales de Accem y CEAR, Manuel Sánchez y José Carlos Budia respectivamente, como el representante de Cepaim, Javier Pérez; y la coordinadora de Cruz Roja, María José Hernández, dejaron claro que Andalucía está «preparada» para acoger al cupo correspondiente, incluso a los 17.000 previstos para toda España.
Tanto los responsables de las ONG como el Defensor del Pueblo instaron al Gobierno andaluz y español a presionar a la UE para que desbloquee la salida de los refugiados hacinados en campos de concentración de Grecia o Turquía. El acuerdo con el Gobierno turco para retenerlos allí fue tildado por el presidente de Accem de «insolidario» y contrario al derecho de asilo. Todos coincidieron en expresar su «decepción» con la reacción de la UE ante esta crisis.
La coordinadora de Cruz Roja mostró especial preocupación por la situación de los más débiles, los menores y las mujeres.
Los responsables de las ONG hicieron hincapié en que Andalucía y España son lugares «de paso» para estos refugiados durante apenas unas semanas o un mes. Muy pocos de los 8.000 atendidos estos años se han quedado en la comunidad y la mayoría se dirigen a países del norte de Europa donde tienen familiares. No obstante, alertan de que ante los problemas que están encontrando ahora en esos países puede que muchos quieran volver.
Las ONG reclamaron campañas de sensibilización para evitar que atentados como el de Bruselas retraigan la solidaridad de los andaluces así como formación específica para la atención educativa, sanitaria y social de este colectivo cuando finalmente lleguen.