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Mario Daza y Juan Marín, portavoz parlamentario de Cs, en el plató de El Correo TV. / El Correo
El portavoz parlamentario de Ciudadanos en el Parlamento de Andalucía, Juan Marín, reconoció ayer que su formación no está nada satisfecha con el ritmo normativo del Gobierno de Susana Díaz durante este año. «Hay medidas como la Ley de Agricultura o la de Formación Profesional en las que ya sabe el PSOE que va a contar con nuestro apoyo. No entendemos como no han llegado ya a la Cámara», aseguró ayer Marín en una entrevista en el programa Lo Hablamos de El Correo TV. Sí admitió que hubo cierta parálisis en el Gobierno andaluz durante los meses en los que Susana Díaz disputó a Pedro Sánchez la secretaría general del PSOE: «Ningún político es imprescindible. El Gobierno no sólo era Susana Díaz».
La estabilidad política en Andalucía parece garantizada hasta el final de la legislatura, pero Ciudadanos advierte a los socialistas que se pueda poner ya el piloto automático: «Quedan muchas cosas por hacer. Y Cs va a seguir apretando para conseguir más», dijo el portavoz parlamentario, que reconoció que todavía hay aspectos del Presupuesto de 2018 que se están negociando con los socialistas, «queremos lograr alguna cosa más», reconoció.
Ciudadanos cifra en cerca de un 60 por ciento el grado de cumplimiento de las medidas acordadas con el PSOE-A para sacar adelante los Presupuestos de 2017, «nos parece un nivel suficiente». Consideró que el acuerdo para elevar el mínimo exento del Impuesto de Sucesiones al millón de euros «no es una victoria de Ciudadanos, es una cuestión de justicia social». Además subrayó que no es una cuestión en la que su partido «quiera ponerse medallas, si el PP la quiere yo se la doy». Marín insistió en que el Impuesto de Sucesiones es la muestra de la forma de hacer política de su partido, «valoramos, comprobamos la viabilidad, planteamos y negociamos». En este sentido, criticó el trabajo de oposición que ha hecho el Partido Popular en Andalucía, «no puede ser que haya presentado enmiendas de totalidad a todos los presupuestos que haya presentado el Gobierno y que no haya visto ninguna en positivo», afeó.
Pese a ello insistió en que las relaciones con Juan Manuel Moreno Bonilla son «cordiales y cercanas». El martes mantuvieron una reunión en la que trataron algunos asuntos de actualidad.
El apoyo en esta legislatura al PSOE-A no tiene vigencia más allá de estos cuatro años. «Nuestra prioridad es gobernar, después trataríamos de sentarnos con la lista más votada para escuchar sus propuestas, pero si no es posible pasaríamos a la segunda lista», dijo.