La líder de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, pidió este martes a la dirección estatal del partido que reconozca la «mayoría de edad» de la formación en esta comunidad autónoma, «conquistada y legitimada», subrayó, por el mayoritario apoyo de los inscritos: ella ganó las primarias frente a la candidata del aparato nacional.
Rodríguez será así la candidata de Podemos a la Presidencia de la Junta después de ganar las primarias con el 75 por ciento de los votos, por lo que aspira a liderar la confluencia con IU y otras fuerzas de izquierda que ella misma ha impulsado, un proceso que, dijo, ha sido «legitimado» con su victoria.
La dirigente anticapitalista se impuso a la diputada Isabel Franco, cercana a la dirección estatal de Podemos, que logró el 22 por ciento de los sufragios, mientras que la tercera candidata, Leticia García Panal, concejala de Podemos de Nívar (Granada), obtuvo el 3 por ciento.
«No se trataba solo de elegir una lista. Se trataba también de decir que somos mayores de edad, de una especie de 28F de Podemos Andalucía», en alusión al 28 de febrero de 1980, fecha del referéndum que determinó la autonomía plena para la entonces región de Andalucía.
Hasta 11.522 militantes de Podemos en Andalucía, el 81 por ciento de los 14.241 inscritos, participaron en las primarias, que pivotaron en las discrepantes posturas de las dos principales candidatas sobre el modelo de confluencia con IU, en la disyuntiva entre andalucismo o centralismo y en la reivindicación de que Podemos Andalucía sea una federación dentro de la organización estatal.
La formación morada andaluza tiene autonomía financiera, pero también quiere autonomía para confeccionar sus listas electorales y decidir sobre su política de alianzas, peticiones a las que no accede Madrid, que teme que el nombre de Podemos y su identidad se diluya en la futura coalición electoral con IU y otros partidos, ahora con la denominación Andalucía Adelante.
Estas discrepancias provocaron antes de las primarias situaciones de tensión entre ambas direcciones, especialmente entre Pablo Echenique, secretario de Organización, y Rodríguez, que confía ahora en que la dirección estatal «no intervendrá» su formación.
Por contra, apostó por el diálogo, por mantener la identidad y el nombre de Podemos en la futura coalición, un modelo que se ampliará en las próximas semanas y que –según Rodríguez– será alternativa de gobierno al «susanismo» en esta comunidad autónoma y «garantía de éxito» a nivel estatal.
La coordinadora cree que su partido y los inscritos «han conquistado» la madurez, y la autonomía y han refrendado la confluencia con el resto de partidos, un proceso aún por concretar.
Previsiblemente, las primarias conjuntas con las listas definitivas para las autonómicas se celebrarán a principios de septiembre.
«Queremos un impulso andalucista con un proceso abierto confluyente y generoso, sin disolver la identidad de nadie. Es exactamente lo contrario de lo que hace el PSOE andaluz, cuyo único fin es reproducirse en el poder, perpetuarse. Queremos acabar con la corrupción y el clientelismo en Andalucía», sostuvo la dirigente morada.
A su juicio, el gobierno de Susana Díaz está «agotado y sin ideas» y está ahora «escenificando» con Ciudadanos, su socio de legislatura, una «ruptura».
No obstante, culpó a ambos partidos de haber eludido la toma de medidas para la mayoría social y de aplicar políticas de «derechas y de recortes» en los servicios públicos de la comunidad.