Radiografía sostenible de una cerveza

La principal cervecera en Sevilla, Heineken, sigue una seria estrategia de sostenibilidad. Su última acción: reponer el agua que consume en su producción en Doñana

Ricardo Gamaza RicardoGamaza /
11 mar 2017 / 20:32 h - Actualizado: 11 mar 2017 / 20:36 h.
"Ecoperiodismo"
  • Responsables de Heineken España y de la Consejería de Medio Ambiente repusieron agua en Doñana como gesto de su compromiso. / El Correo
    Responsables de Heineken España y de la Consejería de Medio Ambiente repusieron agua en Doñana como gesto de su compromiso. / El Correo

La apuesta de Heineken España por la sostenibilidad y su compromiso medioambiental con el entorno está integrada en una elaborada estrategia titulada Brindando un Mundo Mejor, a la que ha tenido acceso Ecoperiodismo.

En este plan estratégico, se indica como un «área de actuación prioritaria» la protección de las fuentes de agua. Con este objetivo, la compañía trabaja en dos líneas de actuación: por un lado, optimizar cada vez más el uso de agua en sus fábricas, logrando hasta el momento disminuir su consumo cerca de un 30 por ciento desde 2008; y por otro, en restaurar fuentes de agua para devolver al medio la que finalmente es utilizada en la elaboración de la cerveza. El objetivo final es que el balance hídrico de la compañía sea neutro.

Según la estrategia Brindando un Mundo Mejor, la compañía cervecera internacional detalla «un doble compromiso, social y ambiental» para lo cual articula su actividad en torno a seis áreas clave para «extender la sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor». Se trata de un «enfoque de sostenibilidad» que va, según dice literalmente el documento estratégico, «del campo, al bar».

Para que la sostenibilidad no quede en papel mojado o en una palabra carente de contenido, Heineken ha identificado esas seis áreas donde su actividad puede tener impacto ambiental o social y las ha cruzado con las fases de elaboración de su cerveza: agricultura, maltearía, elaboración, envasado, distribución, consumo y consumidor. Para cada una establece su impacto en el uso del agua, emisión de dióxido de carbono, comercio local, consumo responsable, seguridad y salud, crecimiento de las comunidades y valores y comportamientos.

Las acciones no sólo se plantean en esas seis áreas de trabajo para lograr la mayor sostenibilidad empresarial, sino que además se cuantifican. De esta manera, Heineken indica en su informe estratégico el grado de cumplimiento de objetivos. Así, en el año 2015, la compañía dice haber logrado reducir el consumo de agua en los parámetros marcados, además de conseguir que las cuatro fábricas de Heineken España tengan un plan de protección de fuentes de agua en base a un análisis de riesgos y vulnerabilidades. En lo que respecta a la reducción de emisiones de CO2, apuntan que se ha logrado el objetivo, pero ya se marcan otro para el horizonte 2020: reducir la emisión de este gas causante del cambio climático en un 40 por ciento respecto a las emisiones de 2008. Para lograrlo una de las estrategias ha sido el uso de envases retornables, ya que es en la fabricación de envases donde más CO2 se genera. En este sentido, en la distribución se ha promovido el transporte colaborativo «para reducir las emisiones asociadas, así como el incremento del uso de energías limpias en carretera».

El aprovisionamiento de materias primas sostenibles es otro de los grandes logros ambientales de esta compañía, que asegura que el 71 por ciento de la cebada y el 54 por ciento del lúpulo usado en la elaboración de sus cervezas son sostenibles. Pero además, el compromiso de fomento del desarrollo local y de compras sostenibles la compañía se materializa en que en 2015 el 96 por ciento de sus materias primas han sido de origen español.

Los resultados de esta apuesta real por la sostenibilidad han sido muy positivos, según indica la compañía en su último estudio de reputación con más de 160 respuestas pertenecientes a distintos grupos de interés de Heineken España, entre los que se incluyen: consumidores, distribuidores, empleados, Administraciones Públicas, medios de comunicación, ONG, proveedores y asociaciones comerciales. Dice la compañía en su informe que la empresa está valorada con un 4 sobre un máximo de 5, superando al resto de cerveceras tanto en valoración global como en los aspectos particulares sobre los que se les preguntó.

En lo que se refiere a sus actuaciones locales, Heineken España acaba de poner en marcha su proyecto Doñana. La elaboración de cerveza en la planta que Heineken España tiene en producción en Sevilla requiere de 420 millones de litros de agua y mediante este proyecto –pionero en todo el país–, la empresa cervecera ha establecido una fórmula para compensar ese agua y devolverla a la naturaleza. Para ello ha destinado 300.000 euros y ha buscado un sitio donde el agua es aún más esencial que en otros ecosistemas: Doñana.

Según Mauricio Domínguez-Adame, director de Responsabilidad Social Corporativa de Heineken España, el proyecto «forma parte de nuestra apuesta estratégica por la sostenibilidad, en una región tan especial para Heineken España como es Andalucía, donde tenemos nuestra sede social y dos de nuestras cuatro fábricas, y en un enclave tan emblemático y reconocido como Doñana, uno de los mayores tesoros naturales que tenemos en nuestro país y enclave natural prioritario para la biodiversidad del mundo». Las actuaciones llevadas a cabo en Doñana dentro de esta estrategia de la compañía cervecera suponen un apoyo esencial contra una de las principales amenazas que tiene este espacio natural: la pérdida de agua. De hecho, las lagunas litorales de Doñana, que han jugado históricamente un papel fundamental para este ecosistema, han acortado su temporalidad de inundación debido a la reducción en el número e intensidad de precipitaciones y al descenso de los acuíferos, poniendo en riesgo la vida en los humedales y la propia supervivencia de Doñana.

El programa Doñana de Heineken España mejorará la calidad del ecosistema y el paisaje, favoreciendo la estructura de los suelos y la repoblación de árboles y otras especies autóctonas de ribera. Además, se va a canalizar de una manera óptima el flujo de agua para facilitar la captación de aguas fluviales y la recarga del acuífero mediante el rediseño del paisaje de las lagunas.

En concreto, las actuaciones se llevan a cabo en la laguna de las Pardillas y el Barrero del Arrayán, en el término municipal de Hinojos, además de mejorar el estado de la laguna de San Lázaro, en Villamanrique de la Condesa. En las tres lagunas se está llevando a cabo su naturalización con el fin de aumentar la recarga de sus acuíferos para que las láminas de agua perduren más en el tiempo mejorando la biodiversidad asociada. También se van a potenciar las masas mixtas en el pinar circundante a las lagunas y al barrero, incorporando ejemplares de alcornoques del Quemao del Papa.

Como actuación complementaria, se acometerán medidas de racionalización orientadas a la reducción del consumo de agua en las instalaciones administrativas y de uso público del Espacio Natural de Doñana. Asimismo, se llevará a cabo una adecuación interpretativa, consistente en la colocación de señalización informativa, orientativa y de localización apropiada al entorno.