Suspenso en política de asilo

Amnistía Internacional considera que el acuerdo entre Turquía y la Unión Europea ha causado «sufrimiento» a miles de personas

21 mar 2017 / 08:51 h - Actualizado: 21 mar 2017 / 08:51 h.
"Refugiados"
  • Varios refugiados llegados en plena noche a Lesbos son atendidos por las ONG. / Rafael Avilés
    Varios refugiados llegados en plena noche a Lesbos son atendidos por las ONG. / Rafael Avilés
  • Campo de refugiados de Moria, en Lesbos. / Rafael Avilés
    Campo de refugiados de Moria, en Lesbos. / Rafael Avilés
  • Un agente de la Policía húngara vigila a un grupo de refugiados. / Efe
    Un agente de la Policía húngara vigila a un grupo de refugiados. / Efe

«Históricamente la política de asilo en España ha sido paupérrima», asegura el secretario general de Andalucía Acoge, José Miguel Morales. La organización celebró ayer un encuentro dentro de su campaña Cinco millones de pasos. Juan Moyano, responsable de Gestión del Activismo de Amnistía Internacional Andalucía, planteó ayer algunas de las cuestiones más importantes en cuanto a políticas migratorias y de asilo.

En la fecha en la que se cumple un año del acuerdo entre Turquía y la Unión Europea, Moyano quiso dar una visión real sobre las cifras que se manejan en este periodo en el que ha estado en vigor ese pacto: «Han bajado las llegadas por mar, pero eso es porque muchos han optado por la vía de Libia y la mayoría mueren en el intento». Amnistía Internacional considera que el acuerdo «ha provocado el sufrimiento de miles de personas refugiados y migrantes». Además apunta a que se firmó bajo la premisa de ser Turquía un lugar seguro para estas personas, «pero de su fracaso resultan miles de personas en condiciones míseras e inseguras en las islas griegas». La situación en el país heleno, según relató Moyano, es equivalente a «campos de concentración». Se ubican lejos de los grandes núcleos de población, han pasado de estar recluidos en tiendas de campaña a contenedores y ahora a una especie de casas prefabricadas. Las autoridades griegas han creado un limbo legal sobre la situación de estas personas puesto que «ni da legalidad al asilo ni ordena la devolución forzosa».

A la mayoría de las personas solicitantes de asilo que se encuentran en los campos no se les permite abandonar las islas. Están acorraladas en condiciones de hacinamiento y miseria y, en ocasiones, han sido víctimas de violentos crímenes de odio. Cinco personas refugiadas en Lesbos, una de ellas menor de edad, han muerto por circunstancias fuertemente vinculadas a estas condiciones.

Amnistía Internacional, cuando se cumplen seis años del estallido de la guerra en Siria, exige a las instituciones internacionales la «rendición de cuentas» para que los responsables sean llevados ante los tribunales internacionales. La organización constata que en este conflicto se han perpetrado crímenes de guerra y de lesa humanidad, por lo que solicitan la amplitud de la jurisdicción universal en este tipo de delitos.

Tres países expulsan la mitad de la población refugiada del mundo. Siria, con 4,9 millones de personas; Afganistán, con 2,7 millones y Somalia, con 1,1 millones. Líbano, una país con unos 4,5 millones de habitantes, cuenta ya con un millón de refugiados sirios.

¿Cómo actúa España ante una realidad tan cruda? «Nos hemos convertido en parte de una realidad dura. Hasta hace cuatro o cinco años no había debate. Es obligatorio que ninguna persona se quede sin protección una vez que pisa territorio español», señaló José Miguel Morales.

El dato es demoledor. En septiembre de 2015 España se comprometió a acoger a 15.888 personas, a día de hoy sólo han llegado 852. Según los datos de Eurostat, de las 10.250 peticiones de asilo resueltas el pasado año en España, en un 67 por ciento se ofreció algún tipo de protección. Los estatutos de refugiado concedidos apenas llegaron a los 355, muy por debajo de otros países como Alemania o Francia.

«El modelo de gestión de frontera no es el idóneo. A según que perfiles no se les permite la petición de asilo. El dato de que la mayor parte de las peticiones venga de Venezuela es muy significativo», expuso el secretario general de Andalucía Acoge.

Andalucía Acoge busca con Cinco millones de pasos promover que entre la población se establezca una conexión con los hechos que afectan a las personas refugiadas, sea cual sea su procedencia, mejorando por tanto la comprensión de estos hechos y la sociedad que compartimos y construimos colectivamente.