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Con la pócima secreta para perpetuar el modelo (4-2)

El Utrera somete al Córdoba B, líder, gracias a una atractiva propuesta. Edu Calderón, que se retiró lesionado tras el 2-1, anotó un gol antológico.

08 oct 2015 / 00:06 h - Actualizado: 08 oct 2015 / 00:16 h.
"Tercera División"
  • El cordobesista Leto trata de arrebatar el esférico a Cruz. / Bernardo Ruiz
    El cordobesista Leto trata de arrebatar el esférico a Cruz. / Bernardo Ruiz

Con una ración de fútbol y una sobredosis de raza y sacrificio, el Utrera sometió al líder, un Córdoba B con superávit de calidad y exceso de autosuficiencia. Los hombres de Miguel Ángel Montoya recurrieron a su filosofía creativa, aceptaron el intercambio de mensajes con un rival con talento y talante y apelaron a su ADN para alzar el máximo botín y tramitar su expediente en la universidad autonómica. Bachillerato con matrícula cum laude.

De inicio, el preparador anfitrión dispuso un 1-4-4-1-1 con Blanco en la mediapunta y Salvi en la definición. Los latigazos de Edu Calderón en el carril zurdo multiplicaron la tensión defensiva del filial, con Esteve soberbio en labores creativas y Javi Galán con las pupilas inyectadas en sangre en cada galopada diabólica. El tiempo fue consumiéndose y, antes del asueto, el Utrera liberó una dosis de energía capaz de dinamitar los cimientos de un rascacielos. Yoni, Pozo y Kiko comprobaron el grado de seguridad de Sillero, hasta entonces correcto.

La ‘X’ provisional auguraba una reanudación exigente para el Utrera, que encajó el primer gol de una noche otoñal tras un zurdazo de Quiles que sorprendió a Juan, errático en un alarde de extraña confianza. Los del San Juan Bosco exigieron respeto antes de que Edu Calderón anotara un tanto antológico con una vaselina que enervó a Sillero, hostigado desde entonces y hasta el final por una tropa de rebeldes incrédulos. Sin tiempo para digerir el nuevo mapa, Pozo recogió un rechace en una falta desde la frontal, calibró el microscopio y, con un toque elegante y certero, fusiló al arquero visitante, de amarillo superstición.

Fue entonces cuando los discípulos de Miguel Ángel Montoya interpretaron su libro de estilo con la asombrosa seguridad de quienes predican su religión en el desierto. En pleno recital, y tras una cabalgada de western almeriense de sobremesa de Orozco, Blanco agradeció un regalo de Sillero para facturar el 3-1 y empaquetar el triunfo con una red de protección. Isra se unió al festival cuando el San Juan Bosco rugía de placer y éxtasis. Como en la de aquella noche de otoño en la que el Córdoba B era un líder con el rostro desvencijado a machetazos.

Ficha técnica:

CD Utrera: Juan, Manu Arcenegui, Kiko, Jony, Cruz, Juanjo, Edu Calderón (Orozco 61’), Israel, Salvi (Alberto Pozo 25’), Blanco y Romero (Abraham 72’).

Córdoba CF B: Sillero, Leto, Abel Moreno, Fran Serrano, Bijimine, Esteve, Sebas Moyano (José Mari 83’), Pedro Santos (Sergio García 62’), Quiles, Jordi Ortega y Javi Galán (Moha Traoré 66’).

Goles: 0-1 Quiles (46’). 1-1 Edu Calderón (51’). 2-1 Pozo (61’). 3-1 Blanco (75’). 4-1 Isra (80’). 4-2 Blanco, en propia meta (92’).

Árbitro: Baena Acal (Cádiz). Amarilla al local Alberto Pozo; y a los visitantes Bijimine, Javi Galán y Leto.

Incidencias: 900 espectadores en las gradas del San Juan Bosco.