El Ciclo Andalucía Clásica sigue ofreciéndonos música de cámara de calidad a través de conjuntos consolidados de tan solvente calidad como el Cuarteto Gerhard, avalado por los premios obtenidos dentro y fuera de nuestras fronteras y una forma de abordar la música que pone el acento especialmente en las emociones que cada compositor ha querido transmitir con su obra. Hay depuración técnica en este excelente conjunto español, pero es lo que menos importa e incluso puede que a lo que menos presten atención. No importa tanto la perfección formal cuando se transmite tanta pasión y se logra sintonizar con el público por medio de sentimientos e invocaciones; público que por cierto fue lamentablemente escaso teniendo en cuenta el atractivo de la oferta. Seguramente el tiempo revuelto que acuciaba fuera invitó más a quedarse en casa, aun así...

El Cuarteto nº 1 de Smetana es una respuesta a la pérdida definitiva de su oído, dramatizada a través de un viaje autobiográfico que comienza con las ansias creativas de juventud, su amor por la danza, el recuerdo de un primer amor y la satisfacción creadora interrumpida por el trágico destino. Los integrantes del Gerhard lo entendieron sin embargo como un retrato de la impotencia y el desgarro del compositor ante tan terrible despropósito, atacando con fuerza y ahínco desde la primera nota, mostrando gran seguridad y una intensa emotividad, además de una incontestable habilidad dramática y madurez expositiva. Así justificaron un sonido crispado, incluso disonante y hasta estridente en ocasiones, destinado a transmitir toda la desesperación de quien sufre tan lamentable contratiempo. Una convincente y hábil conversación entre los intérpretes que nos llevó más por el camino de la rabia que de la ensoñación, de la ironía frente al gozo de la danza, del desconsuelo por encima de la mera nostalgia, y finalmente del ímpetu arrebatado antes de concluir de forma prudente y contenida.

Más relajados en las Vistas al mar de Eduard Toldrá, el Gerhard plasmó estas evocaciones poéticas de inconfundible raíz mediterránea potenciando más su carácter romántico involutivo que el modernista que pretendía su autor, con una fuerte carga de lirismo, texturas ligeras y cálidas, cierto influjo impresionista y espiritual hasta llegar a un molto vivace efusivo y jubiloso. Ravel y su Cuarteto de cuerdas, obra juvenil que el compositor dedicó a Fauré, culminó la excelente exhibición de agilidad y conmovedora expresividad de los jóvenes integrantes del conjunto. Aquí subrayaron las líneas exóticas y seductoras habitualmente asociadas a la literatura raveliana, con profusión de trinos y acentos sincopados en el segundo movimiento, gran impulso lírico y ensoñador en el Trés lent, y un enorme torbellino de emociones en el más convencional Vif et agité final. Una exhibición de virtuosismo fluido pero no enrevesado que recorrió el programa de principio a fin en manos de unos intérpretes comprometidos y brillantes.

CUARTETO GERHARD ****

Ciclo Andalucía Clásica. Cuarteto Gerhard: Lluís Castán Cochs y Judit Bardolet Vilaró, violines. Miquel Jordá Saún, viola.Jesús Miralles Roger, violonchelo. Programa: Cuarteto nº 1 en Mi menor “De mi vida”, de Smetana; Vistes al mar, de Toldrá; Cuarteto en Fa mayor, de Ravel. Espacio Turina, miércoles 14 de marzo de 2018.