Treinta años no son nada si los frutos que se han dejado en el camino son un lujo. Lejos queda el año 1985, año en el que se funda el famoso estudio japonés de cine de animación Ghibli comandado por los directores Hayao Miyazaki e Isao Takahata. Desde entonces sólo ha dado obras que son muestra de talento, ingenio y creatividad desbordante. Ya son considerados como clásicos El castillo en el cielo (1986), Mi vecino Totoro (1988), Porco Rosso (1998), El viaje de Chihiro (2001) o las más recientes El viento se levanta (2013) y El cuento de la princesa Kaguya (2013). Se trata de un cine en el que lo consustancial y armónico de la naturaleza se funde con la esencia y la espiritualidad del ser humano.
La historia de la Tortuga Roja parte de una idea del realizador holandés Michael Dudok de Wit reconocido ilustrador y director del galardonado y oscarizado corto Padre e hija (2000). De tan sugerente y atractiva los padres y responsables del prestigioso estudio Ghibli deciden sumarse al proyecto y coproducirlo. El guión cuenta la historia de un naufrago que recala en una isla tropical desierta y en la que tras algunos intentos para abandonarla se da cuenta de que no es posible, de que forma parte de este nuevo mundo. Escrita por el propio Dudok y por la también guionista y realizadora Pascale Ferran, cuya fábula Bird People (2014) pudimos ver en la Sección Oficial del SEFF en el año 2014, es una compleja y a la vez sencilla historia mágica del ciclo de la vida del hombre contada de forma sobria y sin diálogos. Está llena de matices: construida con un trazado y diseño de tonos, fondos y sonidos tibios, ligeros cuasi mágicos, tan ricos y sugerentes que despiertan las más hermosas de las emociones. En ella el hombre se despoja de todo artificio, de toda obligación y de toda necesidad secundaria para congratularse con la naturaleza y con las verdaderas razones de su existencia. Encanto, seducción y hechizo magníficamente construido y con tanto calor como el que irradia el color y la metáfora de la tortuga.
La tortuga roja ****
Francia, Japón 2016 80 min.
Dirección Michael Dudok de Wit
Animación