Divertida, didáctica, sorprendente, imaginativa, entrañable, deliciosa, magistral, virtuosa... Son algunos de los calificativos que definen esta obra, un espectacular recorrido por algunos de los hitos de la música clásica que consigue demostrar, a mayores y pequeños, que al menos en cuanto a la música lo clásico no es sinónimo de aburrimiento.
Para ello Lapso Producciones no ha escatimado en imaginación y recursos. El vestuario, la iluminación y la escenografía reproducen un espacio escénico tan exquisito y elegante como sugerente, y los instrumentos musicales son tan insólitos como fantasiosos. La mayoría son objetos cotidianos como copas, bocinas, timbres, campanillas o herramientas. Aunque también podemos disfrutar del sonido del acordeón, flautas y trompetas. Con todo ello los hermanos Campos, junto a Rafael Rivera que hace las veces de maestro de ceremonias, enseñan a los niños la delicadeza del ‘Ave María’ de Schubert (tocada con un serrucho); la comicidad de ‘Orfeo en los Infiernos’ de Offenbach, la popularidad de la ‘Oda a la Alegría’ de Beethoven o la luminosidad de ‘La Primavera’ de Vivaldi, entre otras.
Todo ello se adereza con las intervenciones cómicas de Rafael Rivera, un delicioso clown que a juzgar por las risas conecta con los peques con facilidad desde el mismo momento en que aparece en escena. Sus intervenciones sirven de hilo conductor y nexo de unión de las diferentes piezas musicales, determinando un discurso cómico que ofrece al público la posibilidad de disfrutar del humor del clown clásico, así como del potencial evocador de la música. Un placer que alcanza su clímax al final, cuando los niños y niñas se dejan llevar por el ritmo y bailan con desenfreno al pie de sus butacas.
Obra: Clásicos excéntricos
Lugar: Teatro Central del 26 de diciembre al 4 de enero
Compañía: Lapso Producciones
Dirección artística: Jorge Barroso
Dirección musical: Antonio J. Campos
Artistas: Rafael Rivera, Antonio Campos y Rafael Campos
Calificación: ****