Desgarrador viaje de un imposible amor familiar

Cine. En El viaje de Nisha ****, que se estrenó ayer, Iram Haq, directora noruega de origen pakistaní, narra el conflicto generacional y cultural en una familia inmigrante

18 ago 2018 / 18:20 h - Actualizado: 18 ago 2018 / 18:35 h.
"Cine"
  • Imagen de la película. / El Correo
    Imagen de la película. / El Correo

Si realizamos una encuesta a persona jóvenes y en ella preguntamos sobre lo que más valoran en su vida nos encontraremos una variedad de respuestas. Si las contáramos obtendríamos como resultado que la mayoría se decanta por la familia. Natural, porque no debemos olvidar que se trata del primer agente de convivencia y socialización, el primer entorno donde se llega al mundo, donde se establece los primeros vínculos afectivos y en el que se sustentan los sentimientos, las actitudes y los valores. Es una estructura que siempre se reivindica como buena y en la que generalmente se tiende a minimizar como lugar generador de conflictos. La familia es una institución que dependiendo de la época, la cultura, la religión y las costumbres se ha definido de una determinada manera. En la actualidad el término ha evolucionado y los modelos aceptados son diversos y variados. La mayoría de las veces ha servido y sirve para procurar desarrollo y bienestar en una parte o en la totalidad de sus miembros y en otras para provocar dolor y daño.

Nisha una joven de 16 años vive en Noruega con su familia pakistaní, y es la descendiente de una generación de migrantes que buscó hace unos años un porvenir fuera de su tierra, esa que de puertas para afuera se ha integrado en la sociedad occidental, pero que en la intimidad de la casa vive presa de unas costumbres propias de la Edad Media. Su tormento se inicia cuando su padre la encuentra con un chico noruego en su habitación. Promovido por este, apoyado por su hermano mayor, impulsado por su madre y con el beneplácito de la vecindad que temen las habladurías, intentan enderezar su conducta, y para ello no se les ocurre nada mejor que condenarla a vivir durante un tiempo con otros familiares en su país de origen. Su futuro que hasta ese momento era feliz y prometedor se tuerce. Allí atrapada entre rejas, con los miedos e ilusiones propias de su edad, sufre el peso de la tradición por el hecho de haber nacido mujer. La dedican a realizar labores domésticas y a responder a los deseos y normas impuestas de una civilización que no reconoce. Queda sentenciada a vivir en silencio, a ser sumisa y a respetar una religión y una cultura que la anula como persona. Echa de menos a su padre, a su hermana pequeña y a sus amistades, pero cuando regresa de nuevo a Noruega se encuentra que nada ha cambiado, que para su familia sigue siendo un objeto. Mientras a su hermano le espera unos estudios de medicina a ella le espera otro castigo. Duele, pero ha llegado el momento de cuestionar esos vínculos profundos y perniciosos adquiridos a lo largo de su vida, esos lazos que en su caso no sólo la atan sino que también la invalidan.

La directora Iram Haq ha elaborado con El viaje de Nisha una desgarradora ficción basada en su propia experiencia. No ha realizado un drama, tampoco una tragedia, simplemente ha escrito y dirigido una película de terror. Y en ella no aparecen fantasmas, tampoco casas encantadas, ni seres de otra dimensión. De hecho, aquí los monstruos son reales, son cada uno y cada una de los miembros de su familia que actúan recluyendo, coartando y asfixiando la libertad y los derechos fundamentales de un inocente ser humano de tan sólo 16 años, y lo hacen en nombre de la tradición y al amparo de una religión misógina y machista.

Ficha técnica:

Título: El viaje de Nisha ****

País: Noruega, Alemania, Suecia

Año: 2018

Duración: 106 min.

Dirección: Iram Haq

Intérpretes: Maria Mozhdah, Adil Hussain, Rohit Saraf, Ekavali Khanna, Ali Arfan, Sheeba Chaddha, Lalit Parimoo, Jannat Zubair Rehmani, Isak Lie Harr y Nokokure Dahl.

Género: Terror