Diversión y espectáculo a todo tren

El Festival de Cannes, el único capaz de promover y difundir autoría, talento o riesgo y en contadas ocasiones capaz de descubrir inteligencia unida a ceremonia y diversión

07 ene 2017 / 14:18 h - Actualizado: 07 ene 2017 / 14:21 h.
"Cultura","Cine"
  • Cartel de Train to Busan.
    Cartel de Train to Busan.

Sólo un festival en el mundo es capaz de arriesgar y seleccionar productos que el resto descartaría por comerciales o poco ortodoxos para este tipo de eventos. Hablamos del Festival de Cannes, el único capaz de promover y difundir autoría, talento o riesgo y en contadas ocasiones capaz de descubrir inteligencia unida a ceremonia y diversión. Sí, porque esta Train to Busan pasó por la Sección Oficial de este gigante del cine por méritos propios. Mientras una extraña epidemia se extiende por grandes urbes de Corea del Sur, un tiburón de los negocios y su pequeña cogen un tren de alta velocidad desde Seúl con destino a Busan para reencontrarse con su exesposa. El tren sale de la estación con una pasajera que ha contraído el virus y que acaba por transformarla en zombi. La infección se extiende entre el pasaje a la velocidad de la luz, mientras la contaminación se propaga, el cada vez más reducido grupo superviviente sólo tiene un único objetivo: llegar a la ciudad de Busan a toda costa. El director Sang-Ho Yeon, autor de los largos de animación The King of Pigs (2011) y The Fake (2013) que ya impactaron en el Festival de Sitges, y del corto The Window (2013), se despacha con un trabajo planificado y dosificado con gran maestría. Para ello elabora una puesta en escena calculada que juega con los espacios, las luces, los efectos especiales y personajes de íntegra y dudosa moral. Un viaje desasosegante que da como resultado un espectáculo cinematográfico desenfrenado en el que no falta la acción, el suspense y el humor no exento de una fuerte crítica al exacerbado individualismo propio de estos tiempos. Todo un regalo visual y trepidante que no reniega influencias televisivas, del clásico La noche de los muertos vivientes (1968) de George A. Romero, a los juegos visuales de la más reciente Guerra Mundial Z (2013) de Marc Foster, para conseguir con su buen acabado reinventarlas. Lamentablemente su desenlace se deja arrastrar del ramalazo sentimental, canon para contentar a amplias mayorías, hecho que no le impide convertirse por méritos propios en la propuesta más sugerente y estimulante de este año. Y desde ya una nueva obra maestra que sumar al género.

Train to Busan: Cuatro estrellas

Corea del Sur 2016 118 min.

Dirección Sang-Ho Yeon Intérpretes Yoo Gong, Ma Dong-seok, Ahn Soo-he, Kim So-han, Jung Kium-mee.

Terror