El mercenario desnuda la sucia política norteamericana

02 sep 2017 / 15:06 h - Actualizado: 02 sep 2017 / 15:08 h.
"Cine"

Los convulsos años finales de los setenta y primeros ochenta se sucedieron bajo el mandato del presidente norteamericano Jimmy Carter (1977/1981) algunos acontecimientos de un gran calado mundial: la firma de los Tratados sobre el Canal de Panamá, los Acuerdos de paz de Camp David y el establecimiento de las relaciones diplomáticas con la República Popular China. Su sucesor Ronald Reagan(1981/1989) fue más beligerante y se le conoce más por la invasión de la isla caribeña de Granada y por su intento de contener la influencia soviética en Centroamérica apoyando gobiernos autoritarios como los de El Salvador y Guatemala y desestabilizando otros como el de Nicaragua. En un mundo que pintaba las pantallas con un acentuado tecnicolor y bajo este agitado panorama internacional, un piloto de la línea aérea TWA Barry Seal era reclutado por la CIA para tomar fotografías desde el aire por estos países centroamericanos. Un poco más tarde pasa a asociarse con el cártel de Medellín de Pablo Escobar con el fin de ayudarles a introducir su cocaína en Estados Unidos mientras estrecha lazos con la inteligencia de su país transportando armas y milicianos anticomunistas para luchar contra los sandinistas en Nicaragua.

Una vez más el cine norteamericano vuelve a tirar de hemeroteca y recurre a hechos reales para considerar y reconocer al héroe imposible. Pero esta vez lejos de ponerse serios, el guionista Gary Spinelli y el director Doug Liman tiran de la sátira y del humor para convertir esta historia en un espectáculo divertido. Para ello nada mejor que contar las aventuras de Barry Seal con un tono canalla y gamberro, cuasi paródico. El conjunto se beneficia de una cuidada planificación, de una interesante mezcla de texturas y de la esmerada y excelente fotografía de César Charlone, también de un frenético y espectacular montaje y sobre todo, de la descarada y fresca interpretación de Tom Cruise. Además, con tan rocambolesco y divertido relato somos capaces de comprender los tejemanejes de la sucia política estadounidense de esta época. Desgraciadamente sus nefastos resultados aún los estamos pagando. Pero si algo hay que reprocharles a estos lúcidos señores es el carácter irrelevante que les han dado a los roles femeninos, tanto el papel de la esposa como el de la Fiscal del Estado no pasan de ser simples objetos puestos al servicio de las correrías del fantasioso y simpático varón.

Barry Seal: El Traficante **

Estados Unidos 2017 114 min.

Dirección Doug Liman Intérpretes Tom Cruise, Domhall Gleeson, Jayma Mays, Sarah Wright, Jesse Plemons, Lola Kirke, Benito Martínez.

Thriller