Interesante, inquietante, impactante...

La puesta en escena de Julio Fraga apuesta por una escenografía de corte naturalista que contrasta con el espacio sonoro de Paloma Peñarrubia

29 ene 2017 / 16:25 h - Actualizado: 29 ene 2017 / 16:29 h.
"Teatro"
  • Teatro Central.
    Teatro Central.

Tres amigos llegan a una casa rural con la intención de pasar un fin de semana alejado de la vorágine de la ciudad. Es el punto de partida de esta obra, una suerte de thriller dramatizado, tan inquietante como profundo, donde nada es lo que parece.

Y es que en realidad la casa nos es más que un símbolo de nuestra sociedad actual, que por un lado nos invade a estímulos y por otro potencia nuestros miedos e inseguridades. De ahí que la seguridad y la comodidad se hayan erigido en valores predominantes, por encima incluso del amor y la solidaridad. Así, la dramaturgia suscita toda una profunda reflexión sobre los límites de la condición humana y el poder de manipulación de nuestra actual sociedad de mercado. En ese sentido, cabe destacar que más que con un retrato psicológico, la dramaturgia define a los personajes por su forma de enfrentarse a toda una gama de situaciones, que se van sucediendo según una interesante combinación de saltos temporales que potencian la intriga y el suspense.

La puesta en escena de Julio Fraga apuesta por una escenografía de corte naturalista que contrasta con el espacio sonoro de Paloma Peñarrubia, cuyas piezas musicales remiten a las películas de miedo del cine clásico. Imbuidos en esa atmósfera, Piñaki Gómez, Antonio Leiva y Clarisa Ramos imprimen a sus personajes un ritmo vivo, y un alto grado de verdad escénica que nos impacta tanto como nos descoloca. Se trata, por tanto, de una obra sumamente interesante que nos brinda una interpretación memorable. Lástima que la rebeldía del último acto no acabe de estar del todo justificada.

Obra: La Grieta, entre animales salvajes

Lugar: Teatro Central, 28 de enero

Compañía: Remiendo Teatro

Autores: Gracia Morales y Juan Alberto Salvatierra

Director: Julio Fraga.

Música y diseño sonoro: Paloma Peñarrubia

Interpretación: Piñaki Gómez, Antonio Leiva y Clarisa Ramos

Calificación: ****