Falta poco más de un mes para que el 45º Presidente de los Estados Unidos Donald Trump, el mandatario de la nación más poderosa del mundo, celebre su primer año como inquilino de la Casa Blanca. Desde entonces, la polémica por xenóbofo y homófobo, sus salidas de tono, su falta de diplomacia, su bravuconería, los desaciertos caseros e internacionales, los enfrentamientos y su desfachatez ha marcado su trayectoria como político. Todo un (mal) ejemplo del norteamericano de principio del siglo XXI, del que seguramente la historia tomará rendida cuenta. El cine aportará su granito de arena como en el caso de esta Suburbicon; eso sí, recordemos y no olvidemos que este señor fue votado y elegido democráticamente.
No es de extrañar que asombrado por lo que ocurre a su alrededor directores como George Clooney, sensibilizado desde sus inicios como director con causas humanitarias, centre su última película en un episodio de racismo que incluye una comunidad y una modélica familia de la American way of life de los años cincuenta. Una forma de recordar que por las tripas de los 50 estados sigue circulando demasiado excremento y que a pesar del paso de los años y de tantos avances aún no ha sido posible su evacuación. Ciudades idílicas, familias vecinas separadas por muros o vallas, hombres de negocios modélicos que esconden turbias intenciones, son algo más que un espejo de las crueles e incompresibles realidades que seguimos soportando.
Suburbicon ***
Estados Unidos 2017 105 min.
Dirección George Clooney Intérpretes Matt Damon, Julianne Moore, Óscar Isaac, Glenn Fleshler, Noah Jupe, Michael D. Cohen.
Drama