Muchos aficionados y aficionadas llevábamos meses esperando esta cita con uno de los más grandes compositores de música ligera de la segunda mitad del siglo pasado, todo un príncipe de la chanson y el jazz galo. Lo que parece mentira es que Sevilla, tan proclive a celebrar la visita de los grandes compositores cinematográficos, y de la música de cine en general quienquiera que la interprete, dejara pasar esta oportunidad irrepetible permitiendo que el Lope de Vega no presentara un lleno absoluto. Aun así hubo motivos de sobra para disfrutar de un acontecimiento en el que unimos melancolía con mero placer musical, reverenciando a un venerable Michel Legrand que se entregó a pleno en el escenario.

Su versatilidad y proverbial inquietud le ha llevado a tocarlo todo durante sus más de sesenta años de carrera, desde la música melódica, el jazz, el clásico – su último trabajo discográfico fue concebido para la soprano Natalie Dessay, y sus interpretaciones de Satie se pueden considerar más que aceptables – la música sinfónica y, sobre todo, la cinematográfica. Teníamos por lo tanto gran expectación por cuál de estas vertientes brillaría más en el concierto, ante la falta de información al respecto. Lógicamente como lujoso arranque del ciclo de jazz de este teatro, tenía que combinar esta disciplina con sus clásicos para el cine. Una versión instrumental de What Are You Doing the Rest of Your Life? de Con los ojos cerrados, con la que recordó orgulloso a los artistas que la habían inmortalizado, Barbra Streisand, Frank Sinatra o Tony Bennett entre otros; el inolvidable tema de Verano del 42, único de sus tres Oscars representado en el concierto – nos hubiera encantado escuchar también en directo los otros dos, The Windmills of Your Mind de El caso de Thomas Crown, y la banda sonora de Yentl -; o el Tema de Brian como propina, de la película Primavera en otoño que dirigió Clint Eastwood en 1973, se alternaron con sentidos homenajes a grandes del jazz, como Ray Charles o Miles Davis, con quien colaboró en el film Dingo, y a quien el baterista François Laizeau dedicó un encendido y competente rock.

El inevitable homenaje a Jacques Demy vino en forma de enérgicas variaciones, emulando a grandes clásicos del piano como Art Tatum, Errol Garner, Duke Ellington, Oscar Peterson o Count Basie, en Watch What Happens de Lola, y recorriendo diferentes estilos musicales, del dixie al burlesque pasando por la bossa nova o el tango, en el celebérrimo I Will Wait for You de Los paraguas de Cherburgo. También Las señoritas de Rochefort tuvieron su hueco con You Must Remember Spring punteado por el bajista Pierre Boussaguet. Legrand ofrece aún a sus ochenta y cinco años una digitación milagrosa, precisa, ágil, refinada y elegante. Su voz, siempre dulce y aterciopelada, acusa más el paso del tiempo, y si con La valse des lilas logró arrancarnos alguna lágrima de emoción y admiración, su tarareo en Dingo resultó más incómodo. Aun así hubiésemos celebrado más temas cantados, celebrando las inolvidables letras que compusieron Demy o el matrimonio Bergman. Seguramente no volveremos a verlo sobre el escenario, pero siempre nos quedará el feliz recuerdo de haberlo hecho aun en condiciones otoñales, espléndidas y entrañables.

MICHEL LEGRAND ****

Michel Legrand Trio. Michel Legrand, piano. Pierre Boussaguet, contrabajo. François Laizeau, batería. Teatro Lope de Vega, martes 16 de enero de 2018