Los autores, entre las malas noticias y las grandes esperanzas

El informe anual de la Sgae revela una caída amortiguada del sector. Los brotes verdes aún quedan lejos

01 dic 2015 / 22:06 h - Actualizado: 01 dic 2015 / 22:19 h.
"Cine español"
  • El cine andaluz es uno de los apartados que mayores alegrías ha dado este año a las estadísticas, en parte gracias al efecto ‘Ocho apellidos vascos’. / El Correo
    El cine andaluz es uno de los apartados que mayores alegrías ha dado este año a las estadísticas, en parte gracias al efecto ‘Ocho apellidos vascos’. / El Correo
  • La música clásica es uno de los apartados más castigados en la comunidad andaluza, que ha notado los efectos perniciosos de la crisis más que el resto de España.
    La música clásica es uno de los apartados más castigados en la comunidad andaluza, que ha notado los efectos perniciosos de la crisis más que el resto de España.
  • Gracias a los macrofestivales y grandes conciertos, Andalucía muestra ciertos síntomas de alza, especialmente en recaudación, que sube un 4,9 por ciento, sobre un 11,7 total nacional.
    Gracias a los macrofestivales y grandes conciertos, Andalucía muestra ciertos síntomas de alza, especialmente en recaudación, que sube un 4,9 por ciento, sobre un 11,7 total nacional.
  • Tras la debacle de 2003-2004, por primera vez se detecta en el vídeo incremento en la cifra del valor de ventas desde 2008, pero las pérdidas acumuladas ascienden a un 67,1 por ciento entre 2008 y 2014.
    Tras la debacle de 2003-2004, por primera vez se detecta en el vídeo incremento en la cifra del valor de ventas desde 2008, pero las pérdidas acumuladas ascienden a un 67,1 por ciento entre 2008 y 2014.
  • El andaluz consume de media 223 minutos diarios de televisión, 16 puntos por debajo de la media nacional. Queda así en undécima posición en consumo televisivo del territorio español. La radio, en cambio, sigue su tendencia a la baja: Andalucía es la última comunidad española en materia de consumo radiofónico.
    El andaluz consume de media 223 minutos diarios de televisión, 16 puntos por debajo de la media nacional. Queda así en undécima posición en consumo televisivo del territorio español. La radio, en cambio, sigue su tendencia a la baja: Andalucía es la última comunidad española en materia de consumo radiofónico.

Los datos del Anuario Sgae 2015 de las Artes Escénicas, Musicales y Audiovisuales ponen de manifiesto, en primer lugar, la hecatombe que ha supuesto la crisis de los últimos ocho años para el sector. Y, una vez certificado el desastre, pone la lupa en los eventuales, timidísimos brotes verdes. Malas noticias, grandes esperanzas.

Así lo pusieron ayer de manifiesto los responsables de la sociedad en una rueda de prensa de presentación del informe celebrada en el Centro de Estudios Andaluces, donde Rubén Gutiérrez, director de Investigación y Desarrollo de la Sgae, tuvo a bien desgranar los datos por apartados: el más castigado en Andalucía, quizás, la música clásica. El que da más razones para el optimismo, quizás, el cine.

Así, en el capítulo de Artes escénicas se destaca que el descenso en representaciones, asistencia y recaudación no ha ido a más –en comparación, por ejemplo, con el terrible año 2011– pero no se oculta que la asistencia de espectadores en Andalucía ha caído un tercio. «En todo caso, creo que 2014-2015 puede ser un punto de inflexión», dice Gutiérrez.

La música clásica, por su parte, presenta en Andalucía pérdidas mucho mayores en comparación con el total español: 31,7 por ciento de caída en la actividad (frente al 18,7 nacional), 28,5 en número de espectadores (17,9 en toda España) y 26,4 en la recaudación (17,2 nacional). La música sinfónica es la que se lleva la peor parte.

En materia de música popular, se recordó que 2013 fue el peor año, con una pérdida de casi el 12 por ciento de los espectadores vinculada, sobre todo, a la imposición del llamado IVA Cultural. De hecho, hay incluso una buena noticia: la comunidad andaluza, que está en segunda posición en número de conciertos en España, ha aumentado un 4,9 su recaudación, incluyendo obviamente macrofestivales y grandes conciertos.

El cine resiste

El apartado de música grabada no presenta datos específicos para Andalucía, y tampoco significativas alteraciones respecto a los últimos años. La caída pérdida de recaudación de 2013, por ejemplo, comparada con 2008, es del 56,2 por ciento. Sin embargo, se detecta un cambio de tendencia en el incremento del 25 por ciento del valor de las ventas en su conjunto, tanto en el mercado digital como el físico, según explica la Sgae.

También se detecta un muy esperanzador incremento en asistencia a cines del 21,9 por ciento respecto al año anterior, debido, en buena medida al «efecto Ocho apellidos vascos», según dijo Gutiérrez. Eso no quita que la situación del sector siga siendo delicada, con una pérdida de un tercio de las sesiones, en concreto un 29,4 por ciento en el caso de Andalucía.

Tampoco hay datos regionales en el mercado del vídeo, uno de los sectores que antes inició el retroceso, y que prácticamente no ha levantado cabeza desde los años 2003 y 2004. Desde la caída del 69,2 por ciento de 2013, se observa por primera vez un incremento en valor de ventas, que a duras penas disimula las pérdidas acumuladas del 67,1 por ciento.

En televisión, el consumo televisivo medio en España durante el 2014 fue de 239 minutos diarios por persona. A diferencia de otras comunidades, el andaluz se queda en 223 minutos, 16 puntos por debajo de la media.

Por su parte, la radio, que en 2014 mostró una nueva tendencia al descenso de oyentes detectada a partir de 2012, y en Andalucía se acentúa aún más con una pérdida de dos minutos diarios (107) respecto al año anterior. Es la última comunidad en consumo radiofónico en España. Paradójicamente, los ingresos publicitarios vuelven a crecer por primera vez desde 2010, con un 3,9 por ciento más.

Finalmente, los videojuegos también incrementan sus pérdidas en los últimos siete años. Solo el mercado online ha experimentado un incremento notable, del 41,7 por ciento. El físico, en cambio, acumula descensos, si bien cada vez más leves.

Las razones de estas caídas generalizadas son de sobras conocidas, y se muestran obstinadas en el tiempo: además del descenso de la renta de la mayoría de los ciudadanos, la piratería y el IVA del 21 por ciento han hecho estragos, según los expertos, en los hábitos de consumo cultural de nuestro país. La expectativa de una tibia mejora de la economía en general es el altar donde los autores, andaluces y españoles en general, encienden en este final de 2015 sus velas. Pero todos son conscientes de que la fe no basta.

EN CIFRAS

41,7 %. Es el descenso en número de representaciones en artes escénicas (teatro, danza...) experimentado en Andalucía en relación a 2008. La comunidad ha perdido un 12,1 por ciento respecto a 2014. En danza, la caída llega hasta el 46,3 por ciento.

2,8 %. Es el aumento en espectadores de ópera y zarzuela en Andalucía respecto a 2008. La recaudación, en cambio, ha crecido un 2,4 por ciento.

20,6 %. Es la reducción en conciertos de música popular que ha experimentado Andalucía comparando los resultados de 2014 con 2008. Si se incluyen macrofestivales y grandes conciertos, llega a una caída del 37 por ciento.

29,4 %. Es el porcentaje de sesiones de cine perdidas desde 2008. Desde ese mismo año han caído en Andalucía un 17,5 por ciento de espectadores y un 14 de recaudación.

«ES IMPORTANTE VER POR DÓNDE PUEDE VENIR EL FUTURO»

La noticia de que la industria musical avizoraba los primeros brotes verdes gracias al streaming y a ciertos superéxitos musicales contagió de optimismo a todo el sector cultural. ¿Llegaba al fin la luz? «El año pasado se evidenció, en efecto, un cambio de tendencia», explica Rubén Gutiérrez. «Sigue siendo un incremento mínimo, sí, pero es una gran noticia en un panorama que venía cayendo desde 2007. Se acumula desde entonces un descenso del 50 por ciento, de modo que no podemos echar ni mucho menos las campanas al vuelo», agrega el director de Investigación y Desarrollo de la Sgae.

«Es importante ver por dónde puede venir el futuro. Y éste puede estar no tanto en los soportes físicos, como en el mercado digital» prosigue Gutiérrez. «Parecía que la tendencia al alza había encontrado en 2013 su techo, pero se ha pasado ese bache y hemos llegado a un incremento del 30 por ciento».

No obstante, este experto advierte de que el streaming tal vez no sea la gallina de los huevos de oro: según comentó, un productor le confió que de 30.000 descargas digitales que había tenido había recibido tan solo seis euros.