La violinista sevillana Macarena Martínez es el ejemplo perfecto de una artista emergente. Sin embargo, aquilata ya una sólida carrera, siendo profesora de violín en su ciudad natal y habiendo grabado dos discos. Este jueves, a las 20.30 horas, clausurará el Ciclo de Jóvenes Intérpretes que programa en el Teatro de la Maestranza en la Sala Manuel García. Lo hará acompañada por el pianista –también sevillano– Juan Escalera.
En el programa, obras de Brahms, Dvořák, Kreisler, Prokofiev y Turina. «Me apetecía mucho hacer un concierto muy variado en una época en la que se llevan más los recitales monográficos. A mí siempre me ha gustado disfrutar de un artista en distintas facetas. Así, la primera parte estará más centrada en repertorio eslavo y la segunda es mucho más personal; Prokofiev es un compositor que amo y de Joaquín Turina acabamos de grabar su obra completa para violín y piano», cuenta la violinista.
Su camino como músico lo está recorriendo a la inversa que la mayoría, antes que probar suerte como concertista, Macarena Martínez decidió buscar su lugar como docente. «Empecé muy joven a dar clases, la enseñanza me ha ayudado a crecer como músico. Hace no demasiado me di cuenta que me faltaba una parte importante, la de mostrarme al público. Y ese es el camino que he emprendido y que no sé a dónde me llevará», explica. Por ahora ya se ha topado con los primeros conflictos al querer compaginar clases y recitales. «Hay que hacer malabares para que ambos mundos encajen», reconoce. Por eso defiende la valía de los profesores, «muchos de ellos son magníficos músicos, las aulas de los conservatorios españoles están llenas de ellos y hay gente que denosta al docente por el mero hecho de serlo y de no tener una carrera íntegramente de concertista. Eso no es justo», defiende.
Martínez contempla su futuro ligada a las clases y también a la música de cámara. «La orquesta nunca me ha gustado», confiesa. En cambio, su pasión por la música en formato de dúos, tríos y cuartetos la ha llevado a cultivarse como virtuosa en distintas formaciones. Con Juan Escalera lleva cuatro años tocando. «Normalmente interpretamos música francesa, romanticismo alemán, repertorio ruso...», cuenta. Y no descartan abordar la creación contemporánea cuando la unión como dúo sea más «sólida». Por el camino también se cruzó Joaquín Turina, el compositor sevillano más importante del siglo XX. «Hay que saber sacarle partido a su obra; abordarla con imaginación y darle un toque especial que proviene de las propias vivencias de cada uno de nosotros que, como andaluces, entendemos bien el mundo sonoro que le inspiró», concluye.
SEVILLA, ROMA Y LA ORQUESTA CONJUNTA
El 26 de abril Macarena Martínez y Juan Escalera presentarán su disco dedicado a Turina en el Ateneo de Sevilla. «En principio íbamos a hacerlo en el Espacio Turina pero el Ayuntamiento recortó conciertos y entramos en la poda», lamenta. Ya han paseado su música por Salamanca, Valencia y Málaga, entre otras ciudades. Almería, Madrid, Cádiz y Roma son otras de las ciudades en la agenda. El 9 de marzo, además, tocará el Concierto para violín de Kurt Weill con la Orquesta Sinfónica Conjunta en el Auditorio de Ingenieros.
