Palmas por tangos con el profesor José de la Tomasa

Medio centenar largo de niños arropan con palmas los tangos de un cantaor veterano como José de la Tomasa en el Dormitorio Alto de Santa Clara. No se van de compás, aunque muchos de los chavales no están familiarizados con el flamenco. Es el colofón de una mañana de trabajo en el marco de La Bienal va a la Escuela, el programa que quiere acercar a miles de niños sevillanos las claves del universo jondo.

Si en la anterior edición del ciclo fueron 5.000 los niños que pudieron disfrutar de estas clases –con Esperanza Fernández como artista invitada de una de ellas–, este año se espera que sean bastantes más. Ayer, los escolares de 5º de primaria del colegio público Vélez de Guevara, de la barriada del parque Alcosa, pudieron aproximarse a los secretos del baile, el cante y el toque, aunque para algunos el flamenco es el pan de cada día.

Es el caso de Toñi y Manuela Pérez Flores, mellizas de diez años de edad, a quienes sus padres enseñaron a cantar y bailar «desde chicas. En casa hacemos fiestas por rumbas, tangos y bulerías», afirman, y añaden que incluso en los recreos tienen por costumbre juntarse con otros niños para bailar, «y el que no sabe va aprendiendo, mirándonos. Creemos que el flamenco es muy importante porque nos enseña cosas, nos ayuda a expresar sentimientos bonitos».

Tampoco es ningún desconocido el flamenco para Sara El Asri, de 11 años, nacida en Tánger y familiarizada con los sonidos jondos desde muy temprana edad. «Estuve en una academia cuando era más chica, me sabía todo, pero con los años se me olvidó», asegura. Ahora espera que el ciclo de la Bienal le ayude a recuperar su memoria bailaora, porque «creo que es una forma muy divertida de aprender a bailar y a moverte», añade.

Un rato antes, el maestro De la Tomasa evocó para ellos sus comienzos, cuando estaba más interesado en escuchar a los Beatles que a Chacón y Manuel Torre. «Yo creía que iba a ser un cantante moderno», relató. «Tuve la mala suerte de ganar un concurso en Mairena del Alcor, y acabé dedicándome a esto. Digo mala suerte por el miedo que estoy pasando».

Y ante la curiosidad de los pequeños, agregó: «Me refiero al miedo a la responsabilidad, no a nada terrorífico. Eso sí, le ponía y le he puesto siempre una ilusión increíble, y esto es lo que os animo a que hagáis vosotros también. Que respetéis vuestra cultura, vuestra música, vuestro baile. Lo que tenéis en la piel, respetadlo».

El cantaor estuvo acompañado por Isabel Ojeda, directora general de Cultura del Ayuntamiento, Adela Castaño, delegada de Educación, Participación Ciudadana y Edificios Municipales, y el director de la Bienal, Cristóbal Ortega.

Cabe recordar que La Bienal va a la Escuela fue creada en 2014. Entre las acciones previstas este año, destacan 30 talleres de flamenco a celebrar a partir del 1 de junio en horario escolar. También se incluye la iniciativa de la producción de un espectáculo flamenco, Cervantito de Sevilla y su duende digital, en honor a Cervantes, que se representará en diversos centros cívicos de la ciudad.