-
El actor y cantante malagueño Fran Perea. / El Correo
«Con 23 años empecé en Los Serrano», relata el actor malagueño Fran Perea. «Pero interpretaba a un chaval de unos 17». La famosa serie de Los Serrano fue vista por millones de españoles. Pero Perea no dudó en «salir corriendo cuando se acabó el contrato de 3 años». Como comenta, «la fama se puede convertir en algo muy tenebroso». Así lo contó este viernes en lo que fue un encuentro con estudiantes en la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla. El evento tuvo lugar gracias a la Fundación Coca-Cola, que, con el objetivo de promover entre los más jóvenes la cultura y las artes escénicas desarrolla anualmente un pequeño campus de invierno para llevar a diferentes escuelas el oficio del teatro.
No todo es lo que parece, y «no es bueno estar siempre en la palestra, a veces tienes que quitarte presión». Así lo narró el actor en esta jornada en la que quiso contar su experiencia a los que desean seguir un camino como el suyo. «Las escenas íntimas suelen ser de todo menos excitantes», respondía con picardía a una de las preguntas de una alumna.
En este encuentro, el también cantante habló de su faceta en la música. Al éxito Uno más uno son siete, cabecera de la mítica serie también protagonizada por Belén Rueda o Jorge Jurado, le siguieron cuatro discos más en el mercado. Y es que no toda su carrera puede quedarse en la mítica serie que acabó siendo un sueño. Tras acabar sus estudios en la Escuela Superior de Arte Dramático de Málaga, el que ahora tiene 39 años quería irse «a París a estudiar circo moderno», pero optó finalmente por Madrid. «En menos de un año ya estaba trabajando en una serie, Al salir de clase». Luego vinieron otras, como la más actual, y de periodistas, B&B.
Pero el que también ha sido director teatral con la obra Souvenir –escrita por Pablo Díaz Morilla– tiene un especial cariño a las tablas. Ha participado en Electra, Todos eran mis hijos y Fedra, entre otras. Para hacer teatro «hay que trabajar en equipo» y saber que «dependes de mucha gente». «A veces se levanta el telón y no sabes si has vendido entradas suficientes para pagar todo». También hay que hacer sacrificios. Afirmó que para actuar tuvo que «dejar de jugar al fútbol» aunque le apasionaba. «Te puedes lesionar en cualquier momento y mi cuerpo es mi herramienta de trabajo», contó. Pero aseguró que quiere «dedicarse a esto toda su vida».