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Rubén Castro celebra el último gol marcado al Valencia en el Villamarín. Fue en febrero de 2016 y sirvió para que los tres puntos se quedaran en Heliópolis. / Manuel Gómez
El miércoles se cumplió un mes desde que Rubén Castro anotara su último gol con la camiseta de las trece barras. Fue ante el Leganés en el Benito Villamarín, el pasado 8 de enero. Desde entonces, el equipo que entrena Víctor Sánchez del Amo no ha ganado un solo partido. La castrodependencia no es nueva en Heliópolis. De hecho, ha sido así casi siempre desde que el canario aterrizara en el coliseo verdiblanco en 2010. La última sequía goleadora de Rubén Castro, aparecida este curso, duró algo más de dos meses: desde septiembre hasta noviembre de 2016, cuando marcó ante el Eibar el único tanto de su equipo, que cayó derrotado en Ipurua (3-1). En total, durante ese tiempo, los heliopolitanos disputaron ocho encuentros, de los que perdieron cinco.
En este último mes, en el que Rubén no ha visto puerta, el Betis ha disputado tres partidos –que debieron ser cuatro si no se suspende el del pasado viernes en Riazor ante el Deportivo de La Coruña–. Durante ese periodo los verdiblancos han tenido que jugar ante el Atlético de Madrid en el Calderón, donde resultaron derrotados (1-0); en el Villamarín ante el Sporting de Gijón (0-0), y otra vez en su estadio ante el Barcelona (1-1). Ese único gol en este intervalo fue obra de Álex Alegría.
Se da la circunstancia de que esta semana el Betis recibe al Valencia, equipo al que Rubén Castro le ha marcado cinco goles en ocho partidos y un doblete en la victoria de su equipo en Mestalla (2-3) esta misma temporada. En la jornada 16 de la temporada 2011/12, el ariete canario marcó dos tantos in extremis que sirvieron para remontar en un enloquecido Villamarín. Por si fuera poco, el año pasado, en la jornada 23 del campeonato, un solitario gol del killer verdiblanco ante los che sirvió para que los tres puntos volviesen a quedarse en territorio bético. Y es que el idilio del canario con el gol cuando el Valencia está enfrente no es nuevo. En total, se han jugado nueve partidos entre Betis y Valencia desde que Rubén viste la camiseta bética. De ellos, el canario sólo se perdió uno. Cuando Rubén actuó el Betis ganó en cinco ocasiones, perdiendo sólo tres –un empate–. Además, anotó en tres de ellos (cinco goles). Cada vez que marcó, el Betis ganó. El sábado, en Heliópolis, una nueva entrega de la interminable historia de Rubén y sus registros.