Ezequiel Calvente, el exjugador del Betis, continúa con su periplo por Centroeuropa después de haber jugado en Alemania y Portugal. Afincado en Hungría desde el año pasado, su agente ha hecho pública a través de las redes sociales su marcha al Haladás procedente del Békéscsaba, en el que ha cuajado una muy buena campaña, con 26 encuentros jugados y 3 goles, aunque no pudo evitar su descenso a la NB II, la segunda división del fútbol de ese país.
La curiosidad de la noticia es que el canterano heliopolitano, que a pesar de su variada carrera sólo tiene 25 años, volverá a vestir de verdiblanco, ya que esos son los colores de su nuevo equipo. Además, da un salto de calidad dentro de Hungría, ya que se va a un conjunto que acabó la OTP Bank Liga como quinto clasificado, a sólo un punto de los puestos que daban derecho a disputar competiciones europeas.
Ezequiel, que estuvo en el Betis del primer ascenso con Pepe Mel (2010-11), se fue del Betis en 2012. Pasó por el Sabadell, luego lo intentó sin mucha fortuna en el Friburgo alemán, regresó a España para defender la camiseta del Recreativo de Huelva, emigró a Portugal para unirse a las filas del Peñafiel y el año pasado se marchó a Hungría.