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Guardado, uno de los fichajes de la campaña aún vigente, se refresca durante un entrenamiento. / Manuel Gómez
El vicepresidente deportivo y responsable de la comisión deportiva del Real Betis, Lorenzo Serra Ferrer, avanza con agilidad en el diseño de su proyecto de la próxima temporada, en la que el cuadro que adiestra Quique Setién participará en la fase de grupos de la Liga Europa. El balear pretende definir la columna vertebral en las próximas semanas gracias a un activo y previo rastreo de los mercados nacional e internacional, una fase de campo que no fue capaz de articular en la campaña precedente a causa de la premura de tiempo con la que dirigió las negociaciones. Serra aterrizó en el aeropuerto de San Pablo de Sevilla procedente de Palma de Mallorca el 12 de mayo de 2017. Dos días después acudió al encuentro en el que el Betis Deportivo se proclamaba campeón de la Liga del grupo X de la Tercera División ante el Atlético Espeleño en Espiel y horas después fue el foco de los elogios en el palco del Benito Villamarín durante el envite ante el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone.
Desde aquel día, en el que el RBB empató con un gol del hoy mediocentro del Real Madrid Dani Ceballos (1-1), la metamorfosis ha sido total y absoluta. Aquel Betis, dirigido de forma interina por el canario Alexis Trujillo –actualmente secretario técnico del primer plantel–, formó con un once inicial del que apenas permanecen cinco jugadores en Heliópolis: el meta Adán, cuyo futuro no se escribirá en La Palmera, el lateral diestro Rafa Navarro, el lateral zurdo Durmisi, al que el club pretende traspasar, el extremo Joaquín y el delantero Rubén Castro, historia viva de la entidad pero con un destino diferente a las coordenadas del Benito Villamarín. Las diferencias entre el primer y el segundo proyecto del mallorquín serán especialmente notorias. En la presente campaña, el Real Betis ya ha concretado los fichajes del meta del RCD Espanyol Pau López y los mediapuntas Canales, que procede de la Real Sociedad, e Inui, de la SD Eibar.
En el tramo actual del calendario del ejercicio liguero 2017-18, sin embargo, Serra, que apenas había cumplido 14 días y 14 noches en el cargo, sólo había formalizado la contratación del delantero de Osasuna Sergio León, por el que pagó 3,5 millones de euros y cuya incorporación fue oficializada el 1 de junio de 2017. Apenas unos días antes, concretamente el 26 de mayo, la entidad de La Palmera confirmaba el aterrizaje de Quique Setién como entrenador de la primera plantilla.
Uno de los principales aliados de la nueva hoja de ruta de Serra Ferrer será el reloj, ya que en la experiencia precedente las urgencias y las negociaciones para reducir la masa salarial y el volumen del bloque que apadrinaron Miguel Torrecilla y Gustavo Poyet y heredó Víctor Sánchez del Amo fueron la nota dominante. Con permiso de Setién y Sergio León, por el que el RBB negoció antes incluso de la llegada de Serra Ferrer, la primera gestión de envergadura del balear fue la del mediapunta del Levante Víctor Camarasa, que estampó su rúbrica en el contrato a cambio de 7 millones de euros. Fue su primera apuesta personal. 24 partidos, 14 con el dorsal de titular, ha sido el balance rubricado por el de Valencia.
Apenas unas horas después recaló en el bloque de Setién otro talento consagrado, el atacante de la Fiorentina Cristian Tello, por el que en las oficinas del Benito Villamarín abonaron al Barça 4 millones más uno adicional en variables. La semana del 3 al 9 de julio fue especialmente intensa en el corazón de Heliópolis, ya que Barragán, una de las sensaciones de la temporada, se unió al club el 6 de julio en calidad de cedido por el Middlesbrough y Amat y Andrés Guardado se enrolaron en el escuadrón verdiblanco 24 horas procedentes del Swansea y el PSV Eindhoven, respectivamente.
Aquellas jornadas maratonianas de reuniones en Heliópolis aumentaron el volumen de una plantilla que trabajaba en su concentración veraniega de Montecastillo. Ya en la tarde del 24 de julio, el siguiente en nutrir la nómina de novedades en el álbum de cromos fue el central del Deportivo Alavés Zouhair Feddal, que arribó a Sevilla con el propósito de potenciar la fiabilidad del eje de la retaguardia, una línea de flotación que alcanzó su mayor cuota de rendimiento, ya en la ventana invernal, con el fichaje de Marc Bartra.
Los últimos del verano fueron, con el sorteo del calendario definido y la afición entregada, el mediapunta del Montpellier Boudebouz, que firmó el 9 de agosto, Javi García, que se entregó a la causa el 14 de agosto, y el talentoso mediapunta costarricense Joel Campbell, el último de la fila. El josefino fue el último en estrechar la mano de Lorenzo Serra Ferrer, que el 31 de agosto cerró un mercado en el que en los prolegómenos del curso 2018-19 ha sido el más rápido en abandonar los boxes.