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Fabián y Loren se abrazan después de que el marbellí marcase el gol de la victoria al elevar el balón sobre Bono, que aparece en primer plano. -
Ramalho y Cristian Tello, en la disputa de un balón. El extremo entró por Sergio León cuando más apretaba el Girona y ayudó al Betis a pasar esa complicada fase. -
Joaquín, al que hay que atribuir un altísimo porcentaje de responsabilidad en el 0-1, controla el balón en otro lance del partido. -
Quique Setién y su colega del Girona, Pablo Machín, se saludan afectuosamente. El técnico rojiblanco tiene mucho mérito, pero ayer no pudo con la racha del Betis. -
Mojica, que envió varios centros con mucho peligro al área del Betis, lo intenta ante Mandi. El argelino falló en la primera oportunidad del Girona pero luego anduvo muy sólido.
Joaquín todavía tiene un mañana
Una obra maestra del portuense atornilla a los verdiblancos en la quinta posesión. Padrino de una nueva quinta de canteranos, el mito del Villamarín sigue impartiendo lecciones magistrales. Setién se rinde a la magia de su capitán: «Qué golazo», gritó
De vez en cuando no está mal que Joaquín Sánchez recuerde que, además de un gran showman, es un excelente futbolista. El mito del Villamarín volvió a dejar anoche en Girona una de esas jugadas que le identifican como un futbolista cinco estrellas. Los béticos más jóvenes que se empiezan a incorporar a la pasión del verde y blanco están teniendo la inmensa suerte de disfrutar del portuense en su segunda juventud porque los que son algo más veteranos tienen en su memoria unas cuantas de las maniobras que le han identificado a lo largo de su carrera.
En la jugada que dibujó en el gol de la victoria del Betis en Girona se plasmaron el pasado, el presente y el futuro de la entidad. El ayer lo representa Joaquín, pero lo mejor de todo es que también es el hoy y el mañana del equipo. En una cabalgada que arrancó en su propio campo, el gaditano se deshizo de dos contrarios antes de dar un pase magistral a Loren, quien resolvió el mano a mano con el portero a la altura de lo que antes había creado su asistente. No pudo contenerse Quique Setién en su festejo del gol y pronunció un rotundo: “¡Qué golazo!” El goleador también es hoy y mañana del Betis, que con el triunfo en Montilivi parece lanzado para poner un broche de esmeralda a la temporada. En su penúltima etapa como futbolista Joaquín Sánchez es uno de los faros de un buen Betis. Mientras siga en activo, no es muy probable que el equipo pase por etapas oscuras y cuando no lo esté será un referente a la hora de que la conexión entre el despacho y el césped sea la adecuada. Así que la historia de este Betis, es la historia de Joaquín.
El equipo de Setién sudó tinta para llevarse los tres puntos. En la primera parte mantuvo el tipo y tuvo ocasiones para marcar más de un gol, pero en la segunda sucumbió al dominio del Girona, que por momentos encerró a los béticos en su área. Atornillado a la quinta posición, el entrenador ha priorizado la conquista de puntos a la exquisitez, que tanto le gusta. La obra maestra de Joaquín no tuvo elaboración, ni posesión larga, pero para un tipo como Setién también fue un golazo