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Javi García, el día de su presentación con el Zenit de San Petersburgo. / El Correo
El Betis quiere apuntalar la cara defensiva de su centro del campo con Javi García, objetivo número uno de Quique Setién y Lorenzo Serra Ferrer desde hace semanas, y todos los pasos siguen apuntando a un feliz desenlace para el club verdiblanco. El último es el fichaje por parte del Zenit de San Petersburgo, entidad propietaria del pase de Javi García, de un futbolista que se mueve en esa misma posición de pivote de contención: Matías Kranevitter.
El centrocampista argentino del Atlético de Madrid, que jugó cedido en el Sevilla la pasada temporada, tiene previsto viajar a Rusia en las próximas horas para someterse al reconocimiento médico y firmar con el Zenit. Es una petición expresa de su técnico, Roberto Mancini. Y un paso más para la salida de Javi García del conjunto ruso, aunque el murciano fue titular el jueves una eliminatoria previa de Liga Europa.
En todo caso, la presencia de Javi García en ese once no significa que se vaya a quedar en el Zenit. Desde hace días negocia la rescisión de su contrato para firmar cuatro años con el Betis, donde además percibirá una de las fichas más altas. Es la única manera de compensar la bajada de sueldo que iba a sufrir de San Petersburgo a Sevilla: un contrato largo y un salario que, sin llegar a lo que cobra en Rusia, sí estará en la primera línea del escalafón verdiblanco.