-
Encarnación Molino, al fondo, durante la primera sesión del juicio contra Lopera / Jesús Barrera
Encarnación Molino, la abogada que representa a Manuel Ruiz de Lopera en el juicio de la Audiencia Provincial, expresó su confianza en que la causa no se retrase más y «esto termine». «Esperamos que la sala acoja nuestras pretensiones», deseó la letrada. Son dos: «Las asociaciones no pueden ejercer la acusación particular y tienen que ser expulsadas del procedimiento. Y luego, la prueba pericial, que entendemos que es nula», resumió.
Una de las críticas más habituales a la defensa de Lopera durante los ocho años de causa, obviamente desde el bando de las acusaciones, ha sido su política de presentar un sinfín de recursos que han retrasado la instrucción y la celebración del juicio oral. «No pretendemos dilatar nada, creo que llega el momento de que esto termine. Pretendemos que se haga una justicia material y real, que se respeten las reglas del juego», ha replicado Molino.
«La instrucción no ha respetado los derechos de la defensa. Se han vulnerado derechos fundamentales, que es sobre lo que se cimenta un proceso penal, en el que deben respetarse las garantías procesales y los derechos de los acusados. La Audiencia confirmó alguna resolución, pero el magistrado ponente [Juan Antonio Peña Calle] fue recusado y la recusación fue estimada. Hay que tenerlo en cuenta. Ha sido también planteada la vulneración del derecho del juez imparcial y veremos qué dice la sala», diseccionó.
¿El caso se viene abajo si las plataformas son rechazadas como acusación particular? «Bueno, todavía quedaría la Fiscalía», respondió la abogada de Montero Aramburu.