La fortaleza bética espera al Sevilla

Tras años en los que el estadio del Betis había lastrado en numerosas ocasiones al equipo verdiblanco, este ha conseguido esta temporada una solidez como local que hacía tiempo que no se recordaba. Las buenas actuaciones cosechadas en el Benito Villamarín, además de las ocho victorias como visitante, han permitido que el conjunto entrenado por Quique Setién haya conseguido esa merecida y trabajada clasificación para la próxima edición de la Europa League. Al ceñir la clasificación de la Liga al apartado exclusivamente de local, el Betis es el sexto mejor equipo de la competición al haber sumado un total de 33 puntos. Estos registros se dividen en diez victorias, tres empates y cinco derrotas en un total de 18 encuentros jugados en el Villamarín. Sólo es superado por los cuatro primeros de la tabla, además del Villarreal, que ha conseguido únicamente dos puntos más que los verdiblancos. Es más, hay que tener en cuenta que las únicas cinco derrotas cosechadas como local han sido ante los cuatro equipos clasificados para la Liga de Campeones del curso venidero y el Athletic Club en la primera vuelta (0-2).

Es cierto que tres de estos cinco partidos perdidos (Valencia, Barcelona y Real Madrid), aun teniendo enfrente a rivales de mucha enjundia, fueron bastante sonados por la cantidad de goles encajados: seis de los valencianistas y cinco tanto de los culés como de los blancos. Precisamente la última derrota en Heliópolis del Betis fue el 3-5 ante el Real Madrid el pasado 18 de febrero, hace ya 12 jornadas y casi dos meses y medio. Desde entonces, la afición verdiblanca ha presenciado cinco partidos, de los cuales cuatro han sido victorias y uno empate, con tan sólo un gol encajado, en la última jornada como local en la victoria ante el Málaga por 2-1.

Ni Real Sociedad, ni Espanyol, ni Eibar ni Las Palmas han conseguido ver puerta en el fortín bético, lo que realza y encumbra el nuevo planteamiento defensivo de tres centrales y dos laterales de largo recorrido que instauró Setién hace un par de meses. Ahora, en esta última jornada de la Liga en el Benito Villamarín, como colofón final a una temporada brillante, el Betis tiene la oportunidad de continuar esta gran racha con una victoria ante el Sevilla. Y para darle más lustre podría incluso dejar al máximo rival sin competición europea. El gran hándicap al que se enfrenta el equipo verdiblanco, sin embargo, es la mala racha que acumula como local frente a los sevillistas. No logran los tres puntos desde abril de 2006, hace ya 12 años (2-1). Desde entonces se han disputado ocho derbis ligueros en el Villamarín (cinco empates y tres derrotas), que ahora vuelve a ser un fortín.