La luz de Sergio León y Boudebouz

El delantero es el máximo goleador del Betis en solitario y está al nivel de Rodrigo, Santi Mina, Aduriz o Griezmann. El francoargelino cuajó ante el Madrid su mejor partido

21 feb 2018 / 07:00 h - Actualizado: 21 feb 2018 / 16:59 h.
"Real Betis","Sergio León","Boudebouz"
  • Sergio León celebra el gol que le marcó al Real Madrid, el octavo para él en la Liga / Raúl Caro (Efe)
    Sergio León celebra el gol que le marcó al Real Madrid, el octavo para él en la Liga / Raúl Caro (Efe)
  • Boudebouz hace un gesto delante de Cristiano Ronaldo durante el partido del domingo / Manuel Gómez
    Boudebouz hace un gesto delante de Cristiano Ronaldo durante el partido del domingo / Manuel Gómez

La derrota contra el Real Madrid dejó alguna que otra nota positiva en las filas del Betis, con todas las comillas y todos los matices que se le deben poner al adjetivo «positiva» teniendo en cuenta que el resultado fue el que fue. Además de esa media hora de la primera parte en la que el conjunto verdiblanco desarboló al vigente campeón de Liga y de Europa, Quique Setién también pudo ver cómo dos futbolistas, entre otros, subían otro peldaño en sus prestaciones: Sergio León y Ryad Boudebouz. El delantero sólo estuvo doce minutos sobre el césped, pero los aprovechó a la perfección marcando el tercer gol de los suyos. Y el francoargelino, uno de los principales fichajes del pasado verano, protagonizó su mejor encuentro hasta ahora, sobre todo en el primer tiempo.

El gol que logró frente al Real Madrid eleva a ocho el registro de Sergio León en la Liga (diez en toda la temporada, ya que en la nefasta eliminatoria de la Copa del Rey contra el Cádiz anotó otros dos). El cordobés es el máximo goleador de la plantilla, ahora en solitario gracias a esa diana del domingo. Lleva una más que Sanabria, lesionado desde hace varios meses. Y si su objetivo era mejorar su marca de la pasada temporada (diez goles en Osasuna), va camino de conseguirlo. Ahora mismo acumula uno más que en la 24ª jornada de ese último curso, aunque para entonces había jugado un poco menos: 20 partidos, 1.445 minutos. En la 2017-18 ha dispuesto de 1.525 minutos (80 más) en 22 encuentros. En el tramo que queda de temporada, catorce jornadas, el entonces atacante rojillo sólo volvió a marcar en dos de ellas: le hizo un gol al Athletic en la 29ª y dos al Leganés en la 31ª.

El ritmo goleador de Sergio León no está mal. Marca un tanto cada 190 minutos (poco más de dos partidos) y, sobre todo, mantiene una cierta regularidad. Excepto en su peor sequía del ejercicio (siete jornadas sin marcar, entre la 8ª y la 15ª), no acostumbra a enlazar más de dos jornadas seguidas sin ver portería. Este último gol, además, tiene su parte de mérito anímico, ya que lo obtuvo en su tercera jornada consecutiva como suplente, además con muy pocos minutos: 26 contra el Villarreal, 15 en Riazor y 12 frente al Madrid. Curiosamente, Setién lo mandó al banquillo después de haber sido titular en la visita al Celta y marcar un gol.

A pesar de perder esa condición de titular indiscutible, Sergio León ocupa una buena posición en la clasificación de goleadores españoles, que esta temporada encabeza Iago Aspas con 15 tantos (2.069 minutos). Además de la estrella del Celta, al verdiblanco sólo lo superan Gerard (Espanyol), con 10 dianas en 2.160’ (no se ha perdido ningún minuto de las 24 jornadas); Ángel (Getafe), con 10 en 1.302’; Portu (Girona), con 9 en 1.952’; y los valencianistas Rodrigo y Santi Mina, con 9 en 1.705’ y 1.098’, respectivamente.

En el siguiente escalón aparece el ariete de Palma del Río, que por ejemplo lleva los mismos goles que tres delanteros tan consagrados y estelares como Aduriz (Athletic, 1.567 minutos), Griezmann (1.768’) y Bacca (1.491’). Y al mismo tiempo tiene dos más que Bale (875’), Ben Yedder (1.168’), Jorge Molina (1.900’) o Asensio (1.092’); tres más que Gameiro (638’) o Muriel (1.081’); cuatro más que Lucas Pérez (1.601’) o Jonathan Viera (1.994’); cinco más que Benzema (1.168’) o Sergi Enrich (1.330’); seis más que Alcácer (482’), Diego Costa (386’, uno cada 193’) o Fernando Torres (451’); y siete más que Vietto (464’).

Boudebouz, titular en las dos últimas jornadas, también tuvo su cuota de lucimiento frente al Real Madrid. Una vuelta antes, en el Bernabéu, el atacante entró en la segunda parte y lo hizo tan mal que él mismo se dio cuenta y decidió parar de jugar y mejorar su puesta a punto física para competir al nivel que exige la Liga española. Desde luego da la impresión de que todavía puede o debe aportar bastante más, pero en el partido del Villamarín repartió varias muestras de su repertorio técnico, incluidos un par de caños. Y no fueron sólo florituras. También participó en la jugada del segundo gol y en general fue un elemento fundamental en el mejor tramo futbolístico de su equipo.

En todo caso, la contribución de Boudebouz todavía es pequeña. En lo que va de campaña apenas ha marcado un gol en la Liga (al Getafe) y otro en la Copa y ha dado dos asistencias, una a Durmisi en el derbi y otra a Tello en el choque copero de vuelta contra el Cádiz.