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22 piezas para un otoño movido

Setién deberá manejar con tiento al grupo de cara al acelerón de calendario que se avecina. Ante las posibles urgencias, la cantera volverá a ser un alivio. El equipo afronta ahora siete partidos en 22 días

11 sep 2018 / 08:27 h - Actualizado: 10 sep 2018 / 21:00 h.
"Real Betis","Quique Setién"
  • Los jugadores del Betis calientan antes de disputar el primer partido de Liga ante el Levante. / La Liga
    Los jugadores del Betis calientan antes de disputar el primer partido de Liga ante el Levante. / La Liga

De las rotaciones deportivas se han escrito tesis doctorales y hasta se ha creado una fórmula que mide su productividad. La capacidad de un entrenador para saber gestionarlas es una de las variables que se tienen en cuenta a la hora de medir la reputación de un entrenador. Lo cada vez más apretado del calendario ha obligado a los técnicos a saber dosificar el esfuerzo de los jugadores sin que el rendimiento del grupo se resiente.

Quique Setíen rota y ha rotado. Pero esta temporada rotará en una coyuntura a la que jamás se había enfrentado en su carrera como entrenador. Tendrá que equilibrar a los elementos con los que cuenta en su plantilla en el escenario de tres competiciones. El cántabro es uno de esos entrenadores que considera que las rotaciones son una cuestión que no las provoca la necesidad (sanción, lesión o cansancio), si no una convicción que sirve de herramienta motivadora. Momo, jugador de Las Palmas, vivió una situación así cuando fue dirigido en el equipo insular por Setién y consideraba las rotaciones como el método del técnico para mantener a toda la plantilla enchufada.

La clasificación europea del pasado curso regala al beticismo, al menos, seis partidos de octubre a diciembre, que se van a intercalar con el calendario doméstico. El primer arreón llega a partir del próximo fin de semana. Desde el sábado el Betis tendrá que afrontar siete partidos en 22 días.

El carrusel comienza ante el Valencia, cinco días después habrá de medirse al Olympiacos en Atenas, en la primera jornada de la fase de grupos de la Europa League. De jueves en Grecia al domingo siguiente en el Benito Villamarín para enfrentarse al Athletic de Bilbao. Otra vez tocará partido el jueves siguiente en Girona en jornada de Liga entre semana. A los tres días, otra vez al césped para recibir al Leganés. A la semana siguiente se repite el escenario con partido jueves y domingo: segunda jornada en casa de la Europa League ante el Dudelange y visitará al Atlético de Madrid en el Wanda.

Con los mismos órganos que cuenta el cuerpo humano (21) afronta el Betis esta temporada. Con ese número, se dice que es posible dar vida a la máquina perfecta. Con 21 jugadores tendrá que afrontar Setién la temporada presente, aunque el entrenador verdiblanco ya ha dejado claro que considera a Kaptoum como la ficha número 22 de la plantilla, pese a que, en principio, jugará con el filial.

La referencia de la temporada pasada ofrece el dato de que el Betis utilizó 29 jugadores a lo largo de los 38 partidos de Liga. Hubo circunstancias especiales como la lesión de dos porteros y la eclosión de jugadores de la cantera en el momento en el que se produjeron bajas de larga duración como las de Feddal o Sanabria. Fueron 29 también los jugadores que utilizó en la temporada 2016/17 cuando estaba a cargo de la Unión Deportiva Las Palmas.

Las cifras del curso anterior reflejan que Setién no es un entrenador timorato a la hora de sacudir sus alineaciones. Tuvo la valentía de hacerle hueco a la cantera y la primera impresión es que este año también va a estar muy pendiente de lo que suceda en el filial. El pasado domingo ya estuvo en la grada presenciando el partido del Betis Deportivo y aprovechó el amistoso de la pasada semana ante el Mérida para darle sitio a las jóvenes promesas. ~