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La grada principal de la ciudad deportiva se llenó para ver el entrenamiento del equipo de Setién. / Manuel Gómez
La plantilla del Real Betis completó ayer una nueva sesión de trabajo a las órdenes de Quique Setién en la ciudad deportiva Luis del Sol ante la presencia de numerosos aficionados, que completaron el aforo de la grada principal. Como viene siendo costumbre desde el inicio de la pretemporada, la entidad abrió las puertas del campo principal de las instalaciones situadas en la avenida de Italia para que sus aficionados disfrutasen de una nueva jornada de puertas abiertas en la que comprobaron in situ las evoluciones del equipo de Setién.
El técnico cántabro dispuso un partidillo entre integrantes del primer y segundo equipo, que quedaron entremezclados durante la práctica. Sergio León y Ryad Boudebouz se perdieron el ejercicio y siguieron los respectivos planes específicos en la recuperación de sus molestias. De este modo, el ariete siguió el tratamiento sobre el césped para la recuperación de la contractura que sufre en el adductor, mientras que el argelino hizo lo propio junto a los fisios, que continúan trabajando junto al mediapunta para fortalecer una de la rodilla del flamante fichaje bético tras el esguince que sufrió antes de su llegada a Heliópolis.
Los cinco internacionales de la plantilla (Andrés Guardado, Nahuel, Mandi, Tosca y Durmisi) tampoco estuvieron presentes, pues siguen concentrados con sus respectivas selecciones para los compromisos que estas disputarán estos días con motivo del parón liguero y de cara a ala clasificación del Mundial de Rusia en 2018. La plantilla disfrutará del fin de semana libre y el lunes volverá al trabajo en la ciudad deportiva a la espera del regreso de estos cinco jugadores y con Sergio León ya en plenas condiciones para preparar el duelo ante el Villarreal de la tercera jornada del campeonato.