Optimizar a Dani Ceballos

Con un buen portero, un magnífico proyecto –realidad ya palpable– de centrocampista y un delantero con números indiscutibles pese a su penosa racha actual, el Betis tiene tres piezas que sólo un nulo acierto acumulado en la definición y concatenación de proyectos deportivos impide convertir en base de un gran equipo. Los de Víctor tenían esta vez enfrente a uno de los mejores de la Liga, con más calidad y mejor estado de forma, por lo que el plan inicial del Betis fue penalizado de inmediato. Casi a los diez segundos. El mayor talento del rival no puede ser defendido con despistes, faltas de coordinación como la del 0-1 o mala lectura de las jugadas y de las armas del contrario, como en el 1-2 y otras tantas jugadas.

Dani Ceballos, el que mejor está de los tres baluartes del Betis, tiene tal ansia de gloria que es capaz de multiplicarse en un generoso esfuerzo que la mayoría de las veces es improductivo y deja en mal lugar a sus compañeros. Y a la dirección deportiva. Ayer, vestido de azul oscuro, tenía delante a otro jugón como Xabi Prieto. La sensación durante el partido y la realidad tras el mismo fue que Ceballos había corrido y participado mil veces más que el vasco pero que su incidencia en el resultado fue menor. Una asistencia del bético y dos buenos y decisivos goles de Xabi. Ha pasado en más de una ocasión: aunque el físico propio de los 20 años lo permita, habría que encauzar de mejor forma el despligue físico y de talento del utrerano. Los 33 años de Xabi Prieto sí son una ventaja en ese tipo de cosas, como la calidad que rodea al realista y no al bético. Otros deben dar la cara y no la dan. Ante la Real, como en Málaga, como en tantas ocasiones, el juego del Betis era Ceballos y sólo Ceballos. Con eso te da para lo que te da, ser 14º en una de las Ligas más pobres por lo bajo y tener que esperar a un día perfecto para que los rivales buenos no te ganen andando.

Así de cruel ha sido la semana de un Betis al que no le salva ni la victoria en La Rosaleda, un espejismo innegable por el paupérrimo estado del rival. No se trata de minusvalorar lo conseguido en Málaga, sino de analizar bien las cosas. El Betis necesita un mundo para marcar y los rivales el mínimo esfuerzo. El Betis necesita optimizar a Ceballos. El Betis necesita una manta más larga, que le tape entero. El Betis necesita...