Rubén Castro atraviesa la peor crisis de su carrera en el Betis

El canario ya está sumido en su sequía más larga como futbolista verdiblanco. Sólo en la Liga lleva ocho jornadas seguidas sin marcar: 693 minutos. En total casi llega a 800 minutos sin ver portería en competición oficial

27 ene 2016 / 09:00 h - Actualizado: 27 ene 2016 / 13:03 h.
"Real Betis","Rubén Castro"
  • Rubén Castro, tirado en el césped durante el Betis-Real Madrid / Manuel Gómez
    Rubén Castro, tirado en el césped durante el Betis-Real Madrid / Manuel Gómez

El Betis por fin ha dejado atrás esa increíble sequía que lo llevó a estar siete jornadas consecutivas (553 minutos) sin marcar un solo gol, pero ahora es su mejor elemento ofensivo el que debe acabar cuanto antes con su particular racha, que es mucho peor que la del equipo. Rubén Castro no marca ni un tanto desde el minuto 3 del partido de la 13ª jornada contra el Levante, que se jugó el 27 de noviembre. Hoy se cumplen dos meses y el canario no ha vuelto a ver portería. Es su peor crisis como futbolista del Betis.

La sequía liguera de Rubén abarca los partidos contra el Celta, Las Palmas, el Sevilla, el Barcelona, el Eibar, el Getafe, el Villarreal y el Real Madrid. Excepto en el Camp Nou y El Madrigal, estadios en los que jugó 75 minutos, jugó el resto de encuentros completos, así que la suma total de los minutos que acumula en blanco se eleva a 693. Es decir, lo que vienen siendo once horas y media sin ver portería.

Nunca antes había estado Rubén ocho encuentros seguidos sin cantar un gol, al menos en los casi seis años de militancia en el Betis. Hasta ahora, su peor marca en la Liga era de 683 minutos sin marcar. La perpetró en su primera temporada en Heliópolis, la 2010-11, en Segunda. Entonces, la sequía le duró siete jornadas, entre la 21ª y la 27ª, entre un gol que le marcó al Alcorcón (43’) y otro que logró frente a Las Palmas (6’). En el minuto 81 del encuentro contra el Real Madrid, el pasado domingo, batió ese registro.

A su nefasta racha actual en la Liga hay que sumarle unos minutos más en la Copa, en concreto los 21 que jugó en el cruce de ida de octavos contra el Sevilla (sustituyó a Jorge Molina en el 69’) y los 83 que estuvo en el césped en el choque de vuelta (esa vez el alcoyano entró por él). El resultado es que Rubén lleva 797 minutos de competición sin celebrar un gol propio. Es decir, más de trece horas. Son diez partidos consecutivos.

La tercera sequía más larga de Rubén también abarcó siete jornadas en la 2011-12. Marcó el gol del triunfo ante el Mallorca en la 2ª jornada (86’), luego estuvo cuatro de baja por lesión y cuando reapareció estuvo siete sin marcar. El túnel se acabó en la visita a Osasuna que casi acaba con Mel (2-1; entró tras el descanso y marcó en el 85’). En total, 646 minutos.

La tercera racha de esta clasificación es más reciente, de la 2013-14, entre las jornadas 14ª y 20ª. También fue de siete jornadas. En total, 549 minutos entre un gol ante el Celta en el Villamarín y otro ante el... Celta, obviamente en Balaídos. En medio se perdió once jornadas por lesión.

UN AÑO DESPUÉS DE LA ÚLTIMA GRAN CRISIS

La última gran crisis de Rubén fue la temporada pasada (2014-15) y coincidió con la solicitud de 25 meses de cárcel para él por parte de la Fiscalía de Sevilla por presunto maltrato y amenazas a una exnovia. La noticia se conoció el 5 de febrero y el punto de partida de su negación ante la portería fue el choque contra la Ponferradina, que se jugó el 8. En total, Rubén estuvo 470 minutos sin ver portería desde que marcó contra el Numancia (en el 27’) hasta un choque contra el Valladolid en el que logró un hat-trick (el primer gol, en el 54’). Por el camino se quedó en blanco contra la Ponferradina, el Albacete, el Girona y el Mirandés. Es su sexta sequía liguera más prolongada como verdiblanco.