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Carlos Bacca celebra el primero de sus goles, el 2-1 contra el Dnipro / EFE
El gran protagonista de la final, Carlos Bacca, acabó roto por la emoción y la felicidad. «Es algo único volver a repetir esto. Quiero disfrutar de este momento», dijo el colombiano nada más acabar el partido.
«Feliz porque pudimos conseguir el título, pude aportar y quiero dedicárselo a Dios, a mi familia que está en Colombia y no pudo venir, a mi esposa y mis hijos. Pude ayudar al equipo con dos goles y ojalá sigan las cosas muy bien», añadió el delantero.