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Beto, durante la Supercopa Euroamericana. / LPM
El Sevilla no pudo conquistar la Supercopa Euroamericana, aunque el partido contra River Plate sirvió a Unai Emery para ver cómo se encuentran los futbolistas que están teniendo menos minutos. Uno de ellos es Beto, si bien en su caso se debe a una lesión en el hombro izquierdo. El pasado 6 de febrero se le diagnosticó una luxacion grado III, siendo el periodo de baja estimado por los servicios médicos “de dos a tres meses”. Incluso se indicó que probablemente la lesión requeriría intervención quirúrgica.
Sin embargo, Beto no sólo esquivó el quirófano sino que incluso se ha empeñado en acortar, y mucho, los plazos. Prueba de ello es que el portugués fue titular ante River y jugó la primera parte. Tras el descanso, el técnico dio entrada a Mariano Barbosa.
Beto no está dispuesto a perder la condición de primer portero. Su lesión ha permitido a Sergio Rico hacerse con la titularidad y demostrar que puede ayudar al equipo. Esto, a su vez, ha provocado que Barbosa quede relegado a un tercer plano.
La lucha por la titularidad es, pues, cosa de dos: Beto y Sergio Rico. Y hay una circunstancia que juega a favor del internacional portugués: el calendario. Athletic, Levante, Barcelona, la eliminatoria contra el Zenit... son los próximos compromisos del Sevilla y el técnico sabe que ahí estará en juego media temporada.
Además, su inminente ampliación de contrato –por dos campañas más una tercera opcional– es una apuesta del club que refuerza la posición de privilegio de Beto en los planes del entrenador.
“Ha cumplido. Queríamos que participase y que después de la lesión encontrase sensaciones para los partidos que vienen”, dijo Emery sobre él tras verle en acción ante River en el Momumental.