El Campeonato Nacional de Liga dará paso este miércoles a uno de los momentos más esperados por la afición: el reencuentro con la Champions, torneo que, por segundo año consecutivo, tendrá en el Sevilla a uno de sus protagonistas. Un Sevilla, además, con ganas de quitarse el sabor de boca de la pasada edición.

A la dificultad de quedar encuadrado en un grupo difícil junto a la Juventus, el Manchester City y el Borussia Mönchengladbach se unió algo innegable: el equipo no dio el nivel exigible, lo que le costó quedar apeado y pasar a la Europa League tras jugarse el ser o no ser en la última jornada. No era fácil desbancar de los dos primeros puestos a la Juventus y al City, pero el Sevilla pudo haber dado más de sí. Ahora, tras ganar otra Europa League y lograr la clasificación directa para la fase de grupos, el equipo nervionense, con Jorge Sampaoli al frente, cuenta ya las horas para reencontrarse con el torneo.

Será en Turín, ciudad de gran recuerdo por el título conquistado en 2014 frente al Benfica y al que el Sevilla regresó el pasado 30 de septiembre para medirse con la Juventus. Ese día, la imagen del equipo, dispuesto a tutear al entonces campeón italiano y subcampeón continental, fue para olvidar. La Vecchia Signora ganó 2-0 con facilidad y prolongó su racha sin perder en casa en competiciones europea a 17 partidos. Su última derrota, 0-2 ante el Bayern (abril de 2013).

La alineación del Sevilla fue la siguiente: Sergio Rico; Coke, Andreolli, Kolo, Tremoulinas; N’Zonzi (Iborra, m.66), Krychowiak; Konoplyanka, Krohn-Dehli, Reyes (Juan Muñoz, m.79); y Kevin Gameiro (Immobile, m.66). Es decir: poco o nada tendrá que ver con la que presente Sampaoli este miércoles en su intento de tumbar a uno de los grandes favoritos y, de paso, tomarse la revancha de la última visita a Turín.

Eso sí: con permiso del líder invicto –tres victorias en tres jornadas– de la Serie A, una Juve de la que se han marchado futbolistas como Morata, Pogba, Isla o Zaza pero que se ha reforzado con Higuaín, Daniel Alves, Pjanic, Pjaca, Benatia o Cuadrado y donde siguen estrellas como Buffon, Bonucci, Chiellini, Barzagli, Kedhira, Marchisio, Mandzukic o Dybala. Casi nada. La Vecchia Signora, además, no olvida su derrota en el Sánchez-Pizjuán en la última jornada de la pasada fase de grupos (1-0). El gol de Llorente la relegó al segundo puesto, quedando emparejada en octavos con el Bayern, su verdugo a la postre. Por ello, también quiere vendetta.