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El día que Bacca se mostró al mundo

Se cumple un año de que el colombiano aniquilara al Madrid con dos goles

26 mar 2015 / 10:53 h - Actualizado: 26 mar 2015 / 19:15 h.
"Sevilla FC","Unai Emery","Bacca"
  • Bacca marca ante Diego López. / EFE
    Bacca marca ante Diego López. / EFE


All Goals - Sevilla 2-1 Real Madrid - 26-03-2014 por yooong

Corría el 26 de marzo de 2014, hace ahora justo un año, cuando el Sevilla recibía en el Sánchez-Pizjuán al Real Madrid. El equipo de Emery ya tenía en mente los cuartos de final de la Europa League frente al Oporto, menos de una semana después –el partido se disputó en miércoles– de eliminar al Betis en el Benito Villamarín, un subidón de adrenalina incalculable. Los de Ancelotti se jugaban la Liga en territorio hostil. Grada llena y un público que deseaba dejar a los de la capital de España con unas mínimas opciones de título.

Pronto se adelantarían el conjunto que vestía de celeste por medio de Cristiano Ronaldo. El miedo de encajar otra media docena era palpable. Aunque este Sevilla ya era distinto al de los años anteriores y tenía en sus filas dos futbolistas que no iban a permitir tal humillación: el capitán Ivan Rakitic y el goleador Carlos Bacca. Fue la noche del colombiano. Dos goles como dos soles para abanderar un triunfo que dio la vuelta al mundo por la importancia que tuvo para el desarrollo final del campeonato. Era la confirmación de que el Sevilla de Unai Emery había despegado. No le dio tiempo para alcanzar la Champions, aunque aterrizaría en Turín para llevarse su tercera Europa League. Y con Bacca como protagonista absoluto del curso.

Justamente frente al Real Madrid, en la jornada 30, el delantero anotaría sus dos últimos goles en la competición doméstica, dejando su marca personal en 14, dos goles menos de los que lleva en el presente ejercicio con diez encuentros aún por disputarse. Si su nombre comenzaba a sonar entre los espectadores españoles y europeos, esa noche alcanzó todo el planeta. Dos zarpazos; dos mano a mano con Diego López llenos de astucia, potencia y eficacia. El primero en un contragolpe veloz tras una pérdida madridista en el centro del campo en el que Bacca cruza la pelota (imagen de la izquierda) ante la salida del meta y el acoso de dos adversarios. El segundo fue de pañuelos blancos en Nervión. Enorme jugada de Ivan Rakitic, superando a Pepe con un sombrero con la espuela y manteniendo el balón hasta el borde del área para efectuar el pase al colombiano en el momento preciso de no estar en fuera de juego. Golazo enorme de Bacca. Jugada espectacular. Victoria de las que hacen afición.

Un año después Bacca está aún mejor. Sus números están muy cerca de rebasar los del pasado año. Sumó 21 goles en 52 partidos, por los 19 de esta campaña en diez choques menos. Sin embargo, el 9 cafetero, concentrado ahora mismo con su selección, no es la clase de ariete de vive sólo del gol. Es algo más. Un futbolista que trabaja en la generación los espacios necesarios para que se luzcan los hombres de segunda línea, como Iborra o Vitolo. “Espero seguir haciendo muchos goles. Estoy haciendo cosas diferentes, trabajando más. Me siento más útil ahora. El delantero no sólo tiene que cumplir con goles”, manifestó Bacca en Win Sport.

El futuro del colombiano será uno de los temas sobre la mesa este verano. Los 30 millones de su cláusula son la principal barrera para todas las pirañas del mercado. Él se encuentra feliz en el club, más aún cuando mejoró su contrato esta temporada. Aunque a sus 28 años desea firmar un gran contrato con un grande europeo o uno equipo poderoso venido a menos con muchos millones en el banco (Italia). No obstante, por el momento descarta cualquier posibilidad de salir: “Cuando haces las cosas bien te tienes que sentir feliz y orgulloso. Soy feliz en el Sevilla y mi familia también. Tengo contrato por cuatro años. Las cosas nos están saliendo muy bien, el equipo están peleando arriba y yo estoy aportando cosas”. Bacca, un hombre de sonrisa permanente con el gol como único leitmotiv.