El Sevilla pondrá en juego en los próximos días gran parte de sus aspiraciones en pa presente campaña. El sábado le espera una cita clave ante el Valencia dentro de la lucha por ocupar uno los cuatro primeros puestos de la Liga y, justo después, se jugará el ser o no ser en la Champions frente al Manchester United.
La expectación es máxima. El Sánchez-Pizjuán se convertirá en una olla a presión frente los de Marcelino, aunque no será sólo en su propio estadio donde el equipo de Vincenzo Montella sienta el calor de su afición. De hecho, unos 2.200 seguidores nervionenses tienen ya confirmada su presencia el próximo martes en el mítico Old Trafford, lo cual representa el mayor desplazamiento de aficionados para asistir a un partido de la Liga de Campeones en la historia del Sevilla lejos de casa. Palabras mayores, sin duda, teniendo en cuenta la batalla que se desató con el precio de las localidades, a lo que hay que añadir, entre otros gastos, el coste del viaje sea cual sea el medio de transporte elegido, sin olvidar que el partido se juega en un día laborable.
Bajo el actual formato de la competición, el Sevilla ha visitado los estadios del AEK de Atenas, Arsenal, Steaua de Bucarest, Slavia de Praga y Fenerbahçe (temporada 2007/08); Rangers, Stuttgart, Unirea Urziceni y CSKA Moscú (2009/10); Sporting de Braga (2010/11); Juventus, Manchester City y Borussia Mönchengladbach (2014/15); Juventus, Dinamo de Zagreb, Olympique de Lyon y Leicester City (2016/17); y Istambul Basaksehir, Liverpool, Spartak de Moscú y Maribor en la actual.
En total, 22 partidos de Liga de Campeones lejos del Sánchez-Pizjuán ante toda suerte de rivales y en los que siempre hubo presencia de sevillistas en las gradas, aunque nunca en el número que se registrará el próximo martes con ocasión de la vuelta de los octavos de final.
Por citar algunos ejemplos, esta temporada unos mil sevillistas se dieron cita en el mítico Anfield para ver el Liverpool-Sevilla y la pasada campaña unos 1.800 estuvieron en el King Power Stadium animando al equipo frente al Leicester.
La trayectoria europea del Sevilla le ha llevado a disputar finales en las que, lógicamente, el desplazamiento de aficionados fue muy superior. También fue superior en citas señaladas de la Europa League, caso de la semifinal contra el Schalke 04 (unos 3.000); la visita a Estoril en el regreso a la competición (unos 3.000); la vuelta del derbi europeo en el Benito Villamarín (2.500); y la vuelta de semifinales contra el Valencia en Mestalla (5.500).
Por distintas razones, cada uno de esos partidos fue especial y el del próximo martes contra el United se unirá a ellos, en este caso por ser el choque de Liga de Capeones disputado lejos del Sánchez-Pizjuán con mayor número de sevillistas en las gradas.