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Éver Banega conduce el balón durante el partido del pasado jueves contra el Celta. / Salvador Sas (Efe)
Era una apuesta arriesgada del tándem Monchi-Emery, pero la apuesta ha sido ganadora. Tras llegar con más dudas que certezas, Éver Banega se ha convertido por méritos propios en uno de los estandartes del Sevilla actual. Su exquisito fútbol e implicación son patentes desde su llegada, allá por el mes de agosto de 2014, previo desembolso de 2,5 millones de euros al Valencia. Hoy en día, el valor de mercado del jugador de Rosario se ha cuadriplicado como mínimo. Los hechos así lo atestiguan.
Además de estar rindiendo posiblemente a su nivel más alto desde que es profesional, este Banega es también el Banega más goleador. El tanto que marcó el pasado jueves al Celta en Balaídos es el séptimo que consigue en la presente campaña. Nunca hasta ahora había alcanzado esa cifra desde que compite en la élite.
Banega reparte sus siete dianas en 26 encuentros. Ha visto puerta todas las competiciones: Supercopa de Europa (uno), Liga (tres), Liga de Campeones (tres) y Copa del Rey (uno).
Esa cifra eleva a diez su registro total de goles con la camiseta del Sevilla, tras haber logrado tres tantos la pasada campaña, primera suya en la entidad.
Estos diez goles le permiten situarse a tan sólo uno de su registro más alto en un mismo club. En sus 185 partidos con el Valencia, el argentino marcó 11; ahora, con el Sevilla, suma 10 en 75. Todo hace indicar, pues, que pulverizará esa marca.
«Tiene tantas condiciones futbolísticas que creo que es el jugador con más calidad que he fichado desde que soy director deportivo. Estoy convencido de que su rendimiento será acorde a su calidad. Con su incorporación no buscamos un sustituto de Rakitic, sino formar una plantilla lo más competitiva posible», dijo Monchi durante su presentación.
El tiempo ha dado la razón al director deportivo y a Emery, quien está sacando lo mejor de Banega. El argentino ha encontrado su hábitat ideal y su aportación es clave. Por ello, el club quiere ampliar el contrato que les une. Y puede que lo consiga, aunque eso no signifique que este talentoso jugador vaya a quedarse necesariamente. Están tentándole, pero él es agradecido y difícilmente se iría sin dejar dinero en las arcas del Sevilla. Si se queda, pues mucho mejor. Mientras tanto, disfruten de él, de su exquisito fútbol. ~