El centro de todos los debates en torno al Sevilla está fijado desde hace semanas en el puesto de delantero centro. Algunos, agarrados a los excelentes resultados del equipo, no ven tanta urgencia de fichar en enero a un punta. A otros el asunto les trae de los nervios aun después del 0-3 en Balaídos. Como casi siempre, la virtud está en el término medio, y parece que en esta ocasión se resume de la siguiente manera: Ben Yedder y Vietto son dos buenos delanteros y no tienen tan malos números como parece, pero ninguno es un delantero centro de referencia, que muchos vemos como lo que de verdad necesita el Sevilla. Y eso que el equipo es de los más goleadores de la historia nervionense... Pero se trata de otra cosa, empezando por la efectividad y terminando por el tipo de recursos con los que cuenta.
Un delantero centro de toda la vida. Un rematador de área. Un nueve que pueda hacer lo que ayer hizo un ocho: rematar de cabeza ante los centrales rivales y definir con tranquilidad ante el portero. Lo hizo Iborra el día en que Ben Yedder salió cabizbajo tras toparse con el portero rival en una acción clara. Ese tipo de delantero no lo tiene el Sevilla y en muchas ocasiones le vendría de perlas. ¿Quién remata de cabeza si no son N’Zonzi o Iborra y a balón parado? ¿Sería o no un buen recurso cuando el rival se te encierra y acabas centrando desde las bandas casi desesperado?
Vietto aporta desmarques continuos y juego combinativo, lo que convence a Sampaoli, pero en muchos partidos acaba huyendo del área, quitándose de encima a los centrales, sobre todo cuando juega sin Ben Yedder al lado. El francés parece tener más mala leche en el área, adonde llega más que el argentino, estirando más al equipo, pero Sampaoli lo tiene por detrás de Vietto en preferencias y no juega mucho.
Y si casi todos vemos esa necesidad no duden que tanto Sampaoli como Monchi la han detectado y trabajan en ello. No sólo Monchi tiene ganada esa confianza, sino que el entrenador va callando a muchos. Hacía tiempo que el Sevilla no tenía a un técnico que manejase tan bien los partidos. A Sampaoli le han acusado de muchas cosas desde que llegó, ¡incluso de rectificar y cambiar de estilo! Hay quienes no se han enterado aún de cómo es el argentino. Verás tú como le traigan a un buen nueve...