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Monchi, en una imagen reciente. / M. G.
El director general deportivo del Sevilla, Monchi, fue uno de los que más sufrió en el Arena Lviv, tanto por el desarrollo del partido como por la grave lesión de Krohn-Dehli, que fue directo al hospital para que le inmovilizaran la rodilla y pueda regresar con el equipo. «La pinta no es buena. Las imágenes lo dicen todo. Hay que intentar ser optimistas, pero no es fácil. Se le ha salido la rodilla», se limitó a decir el de San Fernando, quien analizó el partido y el resultado de la siguiente manera: «Es un buen resultado, pero no es definitivo, ni mucho menos, ahora hay que defenderlo. El partido ha tenido muchos vaivenes. Empezamos bien en el segundo tiempo, hemos tenido pausa, hemos conectado mejor, hemos tenido más el balón, hemos merecido el empate y hemos incluso tenido ocasiones para hacer el tercero. Cualquiera hubiéramos firmado este resultado antes del partido. En la vuelta hay que tener mucha concentración y esforzarnos mucho porque el Shakhtar tiene muchos argumentos. Hemos tenido justo premio. Cuando hemos terminado el primer tiempo estábamos preocupados, pero no han podido mantener el ritmo ni presionar tan arriba».
Antes de finalizar, Monchi recordó que nada está hecho: «Ahora toca sufrir en Sevilla. Intentaremos rematar la faena, no lancemos las campanas al vuelo. Va a ser sufrido y exigente».